Raquel Buenrostro deberá dar continuidad a la política industrial: IDIC

Monterrey, NL. El Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico, pidió a la nueva secretaria de Economía, Raquel Buenrostro Sánchez, dar continuidad a los trabajos y esfuerzos de diseño de políticas industriales que se han realizado y que impulsarán el crecimiento económico y el desarrollo social del país, señaló José Luis de la Cruz Gallegos, director del IDIC.

Algunos de los temas que tendrá que enfrentar la nueva titular de la Secretaría de Economía, son los paneles con Estados Unidos en materia de comercio exterior y energía, por ello es importante que Raquel Buenrostro mantenga el diálogo con el sector privado.

Con relación a las negociaciones del Tratado con Corea del Sur, dijo que se deben tomar en cuenta las afectaciones que en un momento dado podría sufrir el sector de la manufactura si se firma un acuerdo, que no garantice cierto grado de equidad y no ponga un piso parejo en términos de apoyos que ese país ofrece y que podrían exponer a la industria nacional, señaló.

“El perfil de la nueva secretaria de Economía sí es pertinente para la función de este cargo. Raquel Buenrostro tiene maestría en Economía por el Colegio de México y ya se ha desempeñado en los últimos 20 años en el sector público, en distintas áreas vinculadas con la economía. Parte de sus trabajos de investigación han sido en relación a estos temas (económicos), el perfil es de alguien técnicamente sólido y preparado para la función”, recalcó José Luis de la Cruz.

 “No creo que genere demasiada incertidumbre respecto al cambio de la secretaria Clouthier, porque no habría demasiadas modificaciones”.

Aunque reconoció que sí hubo cierta sorpresa y ahora dependerá de los primeros pasos que dé la nueva secretaria para entrar rápidamente en diálogo con el sector productivo y tratar de atenuar la incertidumbre que se generó con la renuncia de Tatiana Clouthier.

Fue algo repentino y se entiende las inquietudes que se pueden despertar, pero yo creo que, si logra tener un buen proceso de comunicación y demostrar sus capacidades técnicas tendrá éxito”. 

Buenrostro, dijo, logró mantener la recaudación fiscal durante la peor crisis económica que ha vivido el país, lo cual es algo que le acredita técnicamente. Además, cuando fue titular del Servicio de Administración Tributaria tenía cierto contacto con la industria, por lo que dependerá de su comunicación y que tan rápido atienda los sectores.

Política industrial

José Luis de la Cruz reconoció que en términos de política industrial la exsecretaria de Economía, Tatiana Clouthier tuvo un logro importante, pues retomó una asignatura pendiente desde hace 30 años, y sacó adelante una política industrial que logró el consenso del sector privado.

A la ex titular de Economía le tocó el periodo de recuperación de la pandemia y fue precisamente la industria la que tuvo el mejor desempeño de los tres principales sectores, a través de las manufacturas, con un crecimiento de 3.5 a 5%, tema “en el que cumplió bien”.

La política industrial es la única que ha logrado que los países salgan de la pobreza y tengan un mayor desarrollo económico, no obstante, ahondó:“Para que tenga éxito la política industrial se requiere: Tener la visión; tener los instrumentos, es decir, el financiamiento; contar con mecanismos de innovación tecnológica; un sistema educativo alineado con los objetivos y una coordinación público-privada-académica para toda la instrumentación que se requiere”.

Por su parte, la Cámara de la Industria de Transformación de Nuevo León (Caintra), felicitó a Raquel Buenrostro, por su nombramiento como secretaria de Economía.

“Hemos colaborado con ella en anteriores ocasiones, y confiamos de que su capacidad y compromiso mostrado con el desarrollo económico de nuestro país, serán de gran impulso para el sector industrial”, indicó el organismo en un comunicado.

Respecto a los proyectos en curso y retos futuros, la Caintra reafirmó su compromiso por seguir colaborando con la dependencia federal para generar un buen clima de negocios, la generación de empleos y el impulso decidido a las Pymes, pues representan la primera línea de defensa social en México.