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Retrasos en cruces ocasionan pérdidas de 20 millones de dólares
El lunes pasado, Marcelo Ebrard se reunió con los gobiernos de Baja California, Sonora, Chihuahua, Nuevo León, Coahuila y Tamaulipas para recabar información.
El daño económico por el retraso en la revisión de tráileres y camiones de carga que cruzan por los puentes internacionales entre Ciudad Juárez y El Paso, Texas, se calcula entre 15 y 20 millones de dólares diarios, informó el gobernador de Chihuahua, Javier Corral Jurado.
“Estos datos se los hemos planteado al canciller Marcelo Ebrard Casaubón, quien ofreció enviarlos a Washington a través de la embajadora mexicana en esa ciudad, Martha Bárcena, para entregarlo al gobierno de los Estados Unidos”, dijo el mandatario.
Recordó que en la reunión con el canciller el pasado lunes, se acordó que se haría llegar esa información para que se integrara al pliego petitorio que la Secretaría de Relaciones Exteriores entregará al gobierno estadounidense para que cese el “estrangulamiento” al flujo de mercancías y personas en la frontera.
Explicó que esa información tiene un doble propósito; por un lado acreditar la acción que está realizando el gobierno mexicano en la frontera sur y, por el otro, el daño que ha ocasionado esta medida de retardar el paso de mercancías en la frontera norte.
“Pero, además, es una medida inútil porque afecta a la economía de ambos países y termina afectando a empresas norteamericanas. Y lo más delicado, estos costos terminan trasladándose a los consumidores”, destacó Javier Corral.
Refirió que luego de la reunión del lunes pasado se le entregó al secretario de Relaciones Exteriores la información precisa que solicitó sobre la situación del tráfico en los puentes fronterizos para que sea enviada al gobierno de Estados Unidos a través de la Embajada mexicana en aquel país.
Respecto a una posible percepción de lentitud del gobierno mexicano para atender la situación de la frontera sur, indicó que Marcelo Ebrard informó en forma detallada cómo está haciendo su tarea para atender el flujo de migrantes de otros países vecinos.
“Lo que pasa es que el número de movimientos, o lo que le llaman de episodios, es de decenas de miles y, en ese sentido, la capacidad también está rebasada, pero México no aceptará ser ese tercer país que Estados Unidos quiere, un país que le cuide su ley de asilo”, dijo.
El inicio
Desde principios de abril, las exportaciones mexicanas se han visto afectadas por una mayor vigilancia migratoria en las aduanas ubicadas en la franja fronteriza de México con Estados Unidos.
El flujo de camiones se retrasa en la medida en que los funcionarios migratorios de la Unión Americana hacen revisiones más exhaustivas respecto a las personas que viajan en los autos y camiones.