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Tras pandemia, sólo cinco estados amortiguan desocupación al cierre del 2020

Nayarit, Yucatán, Baja California Sur, Oaxaca y Chiapas, únicas entidades en disminuir su tasa de desempleo.

En la primera etapa de reapertura las autoridades han dispuesto que los restaurantes coloquen las mesas en zig-zag conservando una distancia de 1.5 metros. Foto EE: Rosario Servin.

En la primera etapa de reapertura las autoridades han dispuesto que los restaurantes coloquen las mesas en zig-zag conservando una distancia de 1.5 metros. Foto EE: Rosario Servin.

Querétaro, Qro. Al cierre del año pasado, 27 entidades reportan alzas en la tasa de desocupación, frente a marzo, previo al inicio del periodo de confinamiento.

De acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo del Inegi, entre marzo y diciembre, sólo cinco entidades registraron descensos en su desocupación: Nayarit (-1.38 puntos porcentuales) de 3.51 a 2.13% de la población económicamente activa -PEA-); Yucatán (-0.56 puntos: de 2.23 a 1.67%); Baja California Sur (-0.30 puntos: de 3.33 a 3.03%); Oaxaca (-0.13 puntos: de 1.58 a 1.45%), y Chiapas (-0.12 puntos: de 2.49 a 2.37 por ciento).

Mientras los mayores aumentos entre marzo y diciembre se dieron en Quintana Roo (+3.38 puntos porcentuales), Tabasco (+2.51 puntos), Chihuahua (+2.19), Querétaro (+2.08), Guanajuato (+2.02) y Ciudad de México (+1.90 puntos).

En tanto, en diciembre pasado, las tasas de desocupación más elevadas del país se localizaron en Tabasco (6.77% de la PEA), Quintana Roo (6.22%), Ciudad de México (5.66%), Tlaxcala (5.39%), Estado de México (5.09%), Durango (4.96%), Coahuila (4.90%) y Querétaro (4.75 por ciento).

Al otro extremo, las tasas más bajas se observaron en Hidalgo (1.26%), Oaxaca (1.45%), Guerrero (1.66%), Yucatán (1.67%), Nayarit (2.13%), Chiapas (2.37%), Michoacán (2.45%), Colima (2.52%), Sinaloa (2.62%) y Morelos (2.74%); cabe mencionar que la ocupación integra a los mercados formal e informal. 

En el caso de Querétaro, su tasa de desocupación de Querétaro llegó a 4.75% al cierre del 2020, la octava más elevada del país y por encima del indicador nacional (3.80%); la tasa mostró un ligero descenso respecto al comportamiento que tuvo a lo largo del segundo semestre del año pasado, cuando arrancó el proceso de reactivación económica.

Durante la segunda mitad del 2020, la tasa de desocupación se elevó hasta posicionar al estado entre los primeros lugares nacionales.

Mientras en julio la tasa de desocupación fue de 8.16%, en agosto rondó en 6.74%, en septiembre se elevó hasta 10.73%, en octubre descendió a 7.64%, en noviembre nuevamente bajó a 6.57%, hasta concluir diciembre con 4.75% de desocupación.

Referente al impacto de la pandemia en el mercado laboral, el número de empleos formales también reportó variaciones a la baja a lo largo del 2020.

En diciembre se perdieron 8,116 puestos de trabajo ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS); 66% (5,361) correspondieron a empleos permanentes y 34% (2,755) a empleos eventuales.

A diciembre, el estado acumula 595,496 puestos de trabajo, una baja de 2.7% (16,282) en comparación con marzo, cuando comenzaban los primeros efectos de la emergencia sanitaria.

Capacitación

En torno al impacto que ha tenido el mercado laboral del estado, Microsoft y la Secretaría de Desarrollo Sustentable (Sedesu) anunciaron un acuerdo conjunto para promover la formación de personas que perdieron su empleo a causa de la pandemia o que están en busca de una ocupación.

El proyecto es parte de la iniciativa que en el 2020 lanzó Microsoft y LinkedIn, que a través de esta última se imparten cursos para fortalecer las capacidades tecnológicas de personas desempleadas, reforzando sus cualidades para insertarse en el mercado.

La habilitación de la plataforma gratuita estaba prevista hasta marzo del presente año, sin embargo, se tomó la decisión de mantenerla activa lo que resta del 2021 (https://opportunity.linkedin.com/es-es/skills-for-in-demand-jobs).

La reinversión de las empresas y de los trabajadores es elemental tras los cambios que ha conllevado la contingencia, explicó el secretario de la Sedesu, Marco Antonio Del Prete Tercero.

“No implica recursos para los estados. Si bien es importante la reactivación a través de apoyos, la principal lección es la reinversión y el cambio de paradigmas para muchas personas. Hoy los empresarios están dedicados a hacer otras cosas. (…) Se notó que empresas no habían dado el paso hacia la digitalización, tenían procesos rudimentarios”, apuntó.

La directora de Filantropía de Microsoft, Lupina Loperena, explicó que se puede hacer uso de diez cursos que en promedio tienen una duración de 13 horas.

“La página correrá todo el 2021, puesto que el primer objetivo es que el mayor número de personas se capaciten en estas habilidades. Hay diez capacidades, la que más se usa es la de vendedor (…) Hay habilidades blandas y herramientas de colaboración virtual. Está muy pensado que la gente que ha perdido su trabajo, gente que debe seguir en trabajo o que pueda cambiar”, mencionó.

estados@eleconomista.mx

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