La muerte también tiene su precio

La muerte de un ser querido es una situación que toma por sorpresa a la mayoría de los mexicanos, y aunque una persona no sabe con certeza cuándo llegará el día de su muerte: ¡Más vale prevenir que lamentar!

No es un secreto que en el país no existe una cultura de la previsión para enfrentar con la cabeza fría la muerte de un ser querido. Al contrario, después de un fallecimiento comienzan los problemas económicos para los deudos, pues encaran sin ninguna previsión los costos funerarios.

Especialistas aseguran que un fallecimiento arroja crisis financiera y emocional, ya que las familias destinan capital en gastos hospitalarios, en medicamentos, honorarios médicos y gastos funerarios, situación que podría descapitalizarlo.

Pero no todo está perdido, pues para ayudar a resolver el problema, en México las funerarias formales ofrecen paquetes que le ayudarán a resolver su pena, y enfrentar su duelo.

Datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) indican que en el 2011 se registraron en el país 66,383 fallecimientos, y se estima que sólo 20% de los casos contó con un paquete de previsión.

Roció García, vocera de Finanzas Prácticas de Visa, consideró que así como las personas ahorran para su retiro o para comprar un bien material, los mexicanos deben ser más conscientes y pensar en su muerte.

Por ello conminó a que dentro de sus planes financieros contrate con antelación -se recomienda a partir de los 35 años- un paquete de servicios funerarios. Durante esta edad, dijo, las personas cuentan con estabilidad emocional y económica.

Para una mayor penetración y concientización, en los centros comerciales hay islas de las principales casas funerarias del país que ofrecen promociones y descuentos.

Carlos Lucak, director general del Grupo Gayosso, explicó que un plan de prevención funeraria se convierte en un instrumento de ahorro para las familias, se paga en mensualidades, es transferible, además de que no tiene fecha de caducidad.

Los paquetes, detalló, tienen un costo que va desde los 44,000 pesos con 36 mensualidades de 1,200 pesos, y cuentan con paquetes plata, oro, diamante y platino. Por lo regular, todos incluyen un ataúd, el servicio de la sala, la cremación del cuerpo (dura de 1 hora 40 minutos a 3 horas).

En la Funeraria J García López, los costos de estos paquetes oscilan entre los 31,968 pesos hasta los 54,800 pesos, sin embargo, podrá pagarlos a 32 meses de 999 pesos o 3,050 pesos respectivamente.

El precio del paquete básico incluye asistencia las 24 horas del día, trámites, traslado del cuerpo, arreglo del cuerpo, ataúd, en caso de inhumación, por lo general, incluye bono y urna de plástico básica.

Debido a que en México los espacios en los cementerios son limitados, la tendencia que vive 80% de las familias mexicanas es optar por la cremación del cuerpo. Ello desencadena un nicho de oportunidad para las funerarias y las nuevas alternativas de urnas.

Algunos otros gastos que tendrá que prever y que incrementarán su presupuesto son: el costo de las urnas, ataúdes (en caso de que el incluido en su paquete no sea de su agrado), servicio de café, flores, gaveta o mausoleo, el precio varía dependiendo de la iglesia o panteón que desea como última morada. Además de la publicación de esquelas y esquelas interactivas, cuarteto musical, ceremonias religiosas, transformación de cenizas en diamantes, registros de estrellas, entre otros.

Vivos se aprovechan del dolor ajeno

No todo lo que brilla es oro al hablar de servicios funerarios, especialistas alertan que en el mercado hay agencias piratas que ofertan paquetes de previsión de hasta 150 pesos semanales y lo único que hacen es lucrar con su dolor y quedarse con su dinero.

Por ello, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) exhortó a que antes de contratar verifique que la agencia funeraria sea reconocida y tenga registrado su contrato.

Recuerde que las funerarias están obligadas por la Ley Federal de Protección al Consumidor (LFPC) a proporcionar información o publicidad veraz, comprobable y exenta de elementos (textos, diálogos, imágenes, denominaciones de origen, etcétera) que puedan inducir a error o confusión.

Recomendaciones generales

• Antes de contratar un servicio funerario compare el precio en por lo menos tres funerarias diferentes.
• Para morir en paz y no heredar problemas a sus familiares es conveniente que haga su testamento.
• Resguarde todos sus documentos personales y de aviso a una persona de su confianza, así al momento de su muerte los trámites se agilizarán.
• En familia platiquen sobre la muerte, juntos tomarán la mejor decisión y evitarán problemas futuros.
• Contrate un plan de previsión funerario, con ello quitará responsabilidad a sus familiares y evitará que tengan que tomar decisiones en momentos de especial vulnerabilidad.
• Al momento de contratar y liquidar su plan funerario, la compañía le deberá entregar un título transferible sin fecha de caducidad.

Lo que no sabía

• La época de día de muertos es la más representativa para las empresas funerarias. El mayor número de muertes se registra en noviembre, diciembre, enero y febrero.
• Enero es el mes en el que se registran más fallecimientos. En esta época se generan 9.7 millones de decesos, mientras en que junio y julio la mortalidad es más baja.
• Las personas de 65 años o más fallecen por complicaciones pulmonares, ocasionadas por cambios de temperatura.
• El mayor número de muertes que se registran durante diciembre es después de la noche de Navidad.
• En el país, 80% de la población opta por la cremación y 20% elige la inhumación.
• El servicio de cremación tiene un costo que va de los 14,000 hasta los 80,000 pesos, depende de la calidad de la urna que se requiera.
• La edad promedio de fallecimiento en México a los 75 años.

karla.gomez@eleconomista.mx