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Planes de salud para adultos mayores, alternativas para cuidarlos
Después de los 65 años, dejamos de ser candidatos para contratar un seguro de gastos médicos mayores por primera vez en la mayoría de aseguradoras, sin embargo, existen alternativas que ofrecen atención preventiva, médica y ocupacional a sus clientes.
Si tenías un seguro de gastos médicos mayores en tu trabajo y quieres continuar con él, aunque ya no tengas ese empleo es posible si te haces cargo de los pagos por tu cuenta
Cuidar a nuestros adultos mayores es una tarea complicada, las necesidades médicas, de atención y ocupacionales se hacen más importantes al pasar la barrera de los 60 años. En ese sentido, conocer las opciones para garantizar la tranquilidad de los adultos mayores es fundamental.
Durante los años de juventud y adultez mediana, lo recomendable es contar con un seguro de gastos médicos mayores para estar prevenidos ante cualquier enfermedad o accidente. En esa etapa de la vida es relativamente fácil contratarlo pues todos somos candidatos y el precio será de acuerdo con nuestra edad y estado de salud.
Una vez que llegamos a los 65 años, la mayoría de aseguradoras no permiten contratar una póliza de gastos médicos mayores, generando que los adultos mayores se queden sin muchas opciones para prevenir un gasto importante ante cualquier eventualidad.
Ante ello, existen empresas que comienzan a ofrecer planes de salud enfocados a la población entre 50 y 85 años, combinando servicios médicos preventivos, de atención ante cualquier circunstancia y ocupacionales.
¿Quiénes son candidatos a estos planes de salud?
Eduardo Ortiz es fundador de Koltin, empresa especializada en este tipo de servicios para adultos mayores, anticipó que los adultos entre 50 y 84 años con 364 días de edad son los que pueden tener una póliza de este tipo.
“Les hacemos un chequeo y revisamos su historial clínico para saber la condición en la que se encuentra el cliente, hay algunos casos donde no podemos ofrecer el servicio por tema de comorbilidades o enfermedades crónicas”, detalló Ortiz.
Al igual que un seguro convencional, el precio será en función de las condiciones de salud de quien vaya a contratar y la edad al momento de la firma, el precio promedio puede ser entre 40,000 y 100,000 pesos anuales a pagar en una exhibición o en pagos mensuales, trimestrales o semestrales.
Componente de atención médica
La prevención es un tema importante dentro de este tipo de productos, estudios de sangre, chequeos generales y consultas precautorias con geriatras, neurólogos, psicólogos y médicos generales es lo que se debe buscar a la hora de contratar el producto.
“El seguro de gastos médicos está respaldado por BBVA seguros, pueden usar su red hospitalaria y de doctores o, si ya tienen médicos de cabecera, pueden usar la opción indemnizatoria”, declaró el fundador de Koltin.
El cliente tendrá un equipo de atención para poder responder ante cualquier emergencia o situación de salud y, la hospitalización, en caso de necesitarlo, será a través de la red hospitalaria que ofrezca la respectiva aseguradora.
Componente ocupacional
Una vida sedentaria es una de las situaciones más tristes para un adulto mayor y, a su vez, provoca que se vayan atrofiando físicamente, merme su salud emocional y empiecen a ser más vulnerables ante enfermedades crónico-degenerativas o, se acentúan los síntomas si es que ya los tenían.
“Pueden tomar clases de inglés, programación, pintura, yoga que, además de mantenerlos ocupados, les ayude a su crecimiento cognitivo y a socializar con gente de su edad en un ambiente adecuado”, relató Eduardo Ortiz y agregó que un adulto mayor ocupado física y mentalmente es menos propenso a accidentes y caídas.
En México, además de Koltin, Mutus y Plan Seguro también ofrecen este tipo de esquemas para adultos mayores, además de ello, están implementando sistemas de Inteligencia Artificial para procesos de cotizaciones y asesorías a través de Internet, lo que significa una experiencia al cliente diferente.
Tener un plan de salud para un adulto mayor es fundamental para cuidar las finanzas personales y familiares en caso de cualquier eventualidad y, prevenir enfermedades siempre es más barato que curarlas. En México, sólo 1% de los adultos mayores tiene contratado un producto de este tipo, lo que los convierte en un sector de la población vulnerable.
