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Aumentan presagios de guerra civil en Libia
La fiereza de las batallas indica que no será fácil derrocar a Gaddafi; el país se acerca a un sangriento conflicto.
Benghazi. FUERZAS LEALES al líder libio Muammar Gaddafi intensificaron un mortífero contraataque este domingo, reforzando ataques contra los rebeldes en dos ciudades del occidente cercanas a su fortaleza de Trípoli, y lanzando ataques aéreos y enfrentando bandas de opositores que marchaban hacia el este, a su pueblo natal de Sirte, al librarse batallas a lo largo de la costa mediterránea.
Mientras tanto, las fuerzas de oposición en el este se retractaron de llamados de ataques aéreos extranjeros y aseguraron que llevarán la lucha contra Gaddafi hasta Trípoli por su cuenta. Los rebeldes aseguraron que derribaron dos aviones del gobierno, que atacaban la refinería de Ras Lanuf, a 600 kilómetros al este de Trípoli, y que cayó en poder de los rebeldes el viernes por la noche, aunque sábado y domingo seguía bajo intenso fuego de artillería.
En Trípoli, la capital despertó a varias horas de intenso fuego de artillería pesada y armas automáticas, en lo que el gobierno afirmó se trataba de celebraciones por las victorias de las fuerzas leales a Gaddafi.
Los eventos del fin de semana sugerían que las tropas de Gaddafi se están reagrupando para un contraataque bien orquestado contra la oposición, que ha logrado ocupar la mitad este del país desde que se inició la revuelta el 17 de febrero. La fiereza de las batallas indica que para la oposición no será fácil derrocar a Gaddafi y que el país se acerca cada vez más a una prolongada y sangrienta guerra civil.
En Zawiyah, una ciudad vital para la industria petrolera libia, muchas docenas de personas murieron y cientos más resultaron heridas el sábado, en lo que testigos describieron como una masacre por parte de las fuerzas del gobierno, que el domingo reanudaron los bombardeos. La ciudad, a 40 kilómetros al oeste de Trípoli, fue escenario del sitio más sangriento del conflicto hasta la fecha. No había electricidad, teléfonos ni acceso a Internet y ambos bandos afirmaban tener el control, pero no había forma de verificarlo.
Al este de Trípoli, la tercera ciudad del país, Misurata, seguía en poder de los rebeldes, pero se encontraba el domingo bajo intenso fuego de artillería y marchaban hacia la ciudad tanques del gobierno, según reportes de la cadena Al-Jazeera.
En varias partes del país, las fuerzas rebeldes aseguraban haber inflingido fuertes daños a las tropas enemigas, a pesar de que están mejor equipadas. Según los rebeldes, han muerto docenas de tropas de Gaddafi y muchos más son prisioneros de guerra.
