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Egipcios quieren a Al-Sisi en la Presidencia
La campaña presidencial no oficial del general Abdel Fattah al-Sisi?ha llegado a las calles de Egipto con impulso creciente.
El Cairo. La campaña presidencial no oficial del general Abdel Fattah al-Sisi?ha llegado a las calles de Egipto con impulso creciente.
Los organizadores recopilan nombres y números; afirman que más de 9 millones de personas -más de 10% de la población de Egipto- ya han firmado la petición para que el hombre que orquestó el golpe de Estado de julio en contra del primer líder democráticamente electo del país se convierta en el próximo Presidente electo de esta nación.
Para muchos egipcios, el surgimiento de un nuevo hombre proveniente del Ejército es una idea reconfortante, después de casi tres años de agitación política desde la caída del expresidente Hosni Mubarak.
Una victoria de Al-Sisi en la votación presidencial de la próxima primavera significaría que Egipto ha dado un giro completo: desde el derrocamiento de un líder militar a la aceptación oficial de uno nuevo.
Desde Gamal Abdel Nasser -en 1952- hasta Mubarak, Egipto ha sido gobernado por hombres que llegaron al poder a través del uso de las fuerzas armadas. Los críticos de Al-Sisi aseguran que su Presidencia terminará con el breve experimento del gobierno civil en esta nación, así como el de la democracia que llevó al islamista Mohamed Morsi al poder en el 2012.
La Al-Sisimanía se ha extendido en toda la nación en un patrón que recuerda a los hombres fuertes del pasado. El rostro del General está omnipresente en los escaparates de las tiendas e incluso en los pasteles; es alabado en canciones, poemas y cánticos.
Al-Sisi, de quien los diplomáticos aseguran que parece disfrutar de la atención, no ha declarado su candidatura. Los activistas afirman que actúan por voluntad propia. Y Al-Sisi ha esquivado tímidamente el tema de su postulación en los discursos y entrevistas.
