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Escándalo recibe a nuevos líderes de China
Los recién instalados líderes comunistas de China se enfrentan a la cuestión inmediata y molesta de lo que se debe hacer con respecto a las quejas de miles de personas que afirman que fueron encarceladas injustamente por el depuesto jefe del partido, Bo Xilai.
Pekín. Los recién instalados líderes comunistas de China se enfrentan a la cuestión inmediata y molesta de lo que se debe hacer con respecto a las quejas de miles de personas que afirman que fueron encarceladas injustamente en Chongqing durante la agresiva represión en contra de la delincuencia del depuesto jefe del partido, Bo Xilai.
Pero el secretario general del Partido Comunista, Xi Jinping -que en sus primeros días se comprometió a luchar contra la corrupción-, acaba de ser confrontado con un nuevo dolor de cabeza en Chongqing: un funcionario local del partido fue despedido la semana pasada por aparecer en un video sexual de hace cinco años publicado recientemente en línea.
El episodio es el último ejemplo de cómo la media de los ciudadanos chinos utiliza cada vez más Internet para exponer la corrupción y el verdadero reto que representa para los gobernantes comunistas de China, que deben lidiar con una población que cuenta con una nueva herramienta para organizar y expresar su indignación.
