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Mediador de la ONU inicia etapa de misión reconciliadora en Siria
El nuevo emisario internacional para Siria, Lajdar Brahimi, llegó a El Cairo, en la primera etapa de una difícil misión de paz tras casi 18 meses de violencia en Siria, un país sumergido en una guerra civil.
El nuevo emisario internacional para Siria, Lajdar Brahimi, llegó a El Cairo, en la primera etapa de una difícil misión de paz tras casi 18 meses de violencia en Siria, un país sumergido en una guerra civil.
En Alepo, segunda ciudad del país en donde se llevan a cabo sangrientos combates entre las fuerzas del régimen y los rebeldes desde julio, un atentado dejó 17 muertos este domingo, según la agencia oficial Sana.
Brahimi, que llegó desde Nueva York con una escala en París, inició su primera visita oficial como enviado de la ONU y de la Liga Árabe tras suceder a Kofi Annan que dimitió el 2 de agosto admitiendo el fracaso de sus esfuerzos y atribuyéndolo a una falta de respaldo de las grandes potencias.
El ex jefe de la diplomacia argelina no hizo declaraciones a su llegada a la capital egipcia, pero su portavoz, Ahmad Fawzi, indicó a la prensa que se reuniría entre otros con el presidente Mohamed Mursi, con el secretario general de la organización panárabe Nabil al Arabi y con personalidades de la oposición siria.
Brahimi tiene previsto viajar dentro de poco a Damasco, cuando la preparación de "los últimos detalles de esta visita hayan terminado", según su portavoz.
Desde su nombramiento, el diplomático argelino repitió que el futuro de Siria lo "determinará su pueblo y nadie más".
Brahimi mantuvo el sábado una conversación telefónica con el ministro iraní de Relaciones Exteriores, Alí Akbar Salehi, y planea viajar a Teherán, aliado clave de Damasco, declaró el domingo un responsable iraní a la agencia Mehr.
La voluntad de la comunidad internacional de imponer sanciones a Siria choca regularmente en el Consejo de Seguridad con el veto ruso y chino, otros dos respaldos de Damasco que ya bloquearon tres resoluciones de condena a Siria.
Este domingo Rusia y Estados Unidos volvieron a dejar en evidencia divergencias para resolver la crisis siria comenzada en marzo de 2011 con un movimiento de protesta pacífico que se militarizó con el correr de los meses.
Las nuevas divergencias entre Moscú y Washington confirman los temores de que continúe el bloqueo de los esfuerzos internacionales para solucionar el conflicto sirio.
La secretaria de Estado norteamericana Hillary Clinton consideró insuficiente la idea de Moscú de promover una nueva resolución en el Consejo de Seguridad de la ONU, que aprobaría el acuerdo concluido en junio, en Ginebra, sobre los principios de una transición política en Siria sin pedir la salida del presidente Bashar al Asad.
Tras pronunciarse el sábado, Clinton volvió a la carga este domingo, diciendo que "no tiene sentido aprobar una resolución sin consecuencias" en caso de incumplimiento, porque entonces Asad la ignoraría.
En declaraciones hechas desde Vladivostok, Rusia, donde participó en la cumbre anual de la APEC, Clinton añadió que si persisten las diferencias con Moscú "trabajaremos con países afines para apoyar a la oposición siria y precipitar el día en que caiga Asad".
En tanto, en el terreno, la violencia seguía haciendo estragos. Los combates entre soldados y rebeldes y los bombardeos de las tropas regulares continuaban en Alepo, Deraa, Idleb, Deir Ezzor y en la provincia de Damasco, según militantes.
Por otra parte, según la agencia oficial Sana, 17 personas murieron y más de 40 resultaron heridas en un atentado que se produjo en el barrio del estadio municipal de Alepo.
El opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) informó que varios barrios de la ciudad como Suk al Hal, Tariq al Bab y Hanano fueron bombardeados por el ejército.
La violencia dejó este domingo 88 muertos en todo el país, en su mayoría civiles, según un balance provisorio del OSDH. Estas cifras son imposibles de verificar con una fuente independiente.
Desde el comienzo del conflicto el 15 de marzo de 2011, más de 27,000 personas murieron según el OSDH.