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Geopolítica

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México, moneda de cambio

La amenaza de Trump de estar dispuesto a caer en un cierre del Gobierno para presionar al Congreso a fin de aprobar fondos para un muro fronterizo, podría poner fin a las delicadas negociaciones en el Capitolio para mantener el gobierno abierto y complicar el trabajo del Congreso de elevar el techo de la deuda.

La amenaza del presidente Donald Trump de estar dispuesto a caer en un cierre del Gobierno para presionar al Congreso a fin de aprobar fondos para un muro fronterizo, podría poner fin a las delicadas negociaciones en el Capitolio para mantener el gobierno abierto y complicar el trabajo del Congreso de elevar el techo de la deuda.

Durante un mitin este martes en Phoenix, Trump elevó su última amenaza sobre el bloqueo de fondos gubernamentales si el Congreso se niega a aprobar 1,600 millones para comenzar la construcción del muro fronterizo a lo largo de la frontera con México.

Construyamos el muro , replicó Trump. Ahora, los demócratas obstruccionistas no quieren que lo hagamos, pero créanme, si tenemos que cerrar nuestro Gobierno (lo haremos), vamos a construir esa muralla , afirmó.

Los demócratas del Congreso no se tardaron en responder la amenaza del presidente. El líder de la minoría demócrata del Senado, Chuck Schumer, y la líder de la minoría demócrata en la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, argumentaron que Trump sería el responsable de conducir a ese callejón sin salida.

Si el presidente persigue este camino, contra los deseos de los republicanos y demócratas, así como la mayoría del pueblo estadounidense, se dirigirá hacia un cierre del Gobierno que nadie querrá y que no logrará nada , dijo Schumer en un comunicado.

El presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, máximo republicano en el Congreso, intentó matizar las palabras del presidente, y aunque aseguró que su partido sí apoyaba la creación de una barrera fronteriza, dijo que nadie está interesado en tener una suspensión del gobierno. No creo que le convenga a nadie , aseguró Ryan a periodistas en Hillsboro, Oregón.

El líder republicano sugirió que necesitarán más tiempo para armar un presupuesto completo, y que lo más probable es que se aprobará una resolución de continuidad con el presupuesto del año pasado. Es decir, por lo menos este año suena improbable que el Congreso apruebe fondos para su prometida obra.

El momento de la amenaza de Trump es significativo. El presupuesto del año pasado expira el 30 de septiembre y el Congreso debe aprobar una medida de gasto para mantener el gobierno abierto, y al mismo tiempo se enfrenta a una fecha límite para elevar el límite de la deuda del país.

Trump tiene como prioridad incluir el financiamiento del muro fronterizo en ese presupuesto, pero para los demócratas es un punto en el que no están dispuestos a ceder, y los miembros del partido rojo necesitan al menos 10 de sus votos para avalar cualquier proyecto.

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