Toledo advierte de "mexicanización" en Perú

El ex presidente Alejandro Toledo, uno de los favoritos para las elecciones del 10 de abril en Perú, dijo este jueves que su país corre el peligro de entrar en un proceso de "mexicanización" por el auge del narcotráfico.

"Perú podría estar en camino de una mexicanización ; ya hay carteles de las drogas que actúan en Perú y (realizan) ajustes de cuentas", dijo el aspirante presidencial en un encuentro con corresponsales extranjeros.

Toledo, quien gobernó entre 2001 y 2006, advirtió el crecimiento de las actividades del narcotráfico en la región al subrayar que en Brasil ha aumentado el consumo de drogas y que lo propio está sucediendo en Venezuela.

El candidato a la reelección alertó que si no se adoptan medidas drásticas el Perú podría terminar convertido en un "Estado narco".

A menos de tres meses de las elecciones, Toledo figura en el primer lugar de las preferencias electorales (con 25 a 27% de simpatías), seguido del ex alcalde de Lima, Luis Castañeda, y de Keiko Fujimori, quienes se encuentran en una situación de empate técnico (19 a 21%).

Como medidas para enfrentar el tráfico de drogas el ex gobernante refirió que, de ser elegido presidente, solicitaría una reunión con el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, para tocar temas centrales como el narcotráfico y la migración.

"Es necesario hablar con los países consumidores para contener la demanda de drogas", precisó.

En el plano interno propuso "reformar y modernizar la policía y reestructurar el Poder Judicial con cambios radicales", tras advertir que esas instituciones son "frágiles" ante el poder de las bandas de traficantes.

"Policías, jueces, fiscales, congresistas y funcionarios públicos son comprados por el narcotráfico", dijo, remarcando que su reforma "será a fondo".

En materia económica, Toledo subrayó que al igual que en su primer gobierno, fomentará la inversión extranjera, pero "sin dar un cheque en blanco a las empresas extranjeras para contaminar los ríos y deforestar los bosques".

México vive una situación de extrema violencia relacionada con el narcotráfico, al que el gobierno le atribuye la mayoría de los más de 34.000 asesinatos perpetrados desde el inicio de una ofensiva antidrogas en 2006.

DOCH