UE amenaza con expulsar a Grecia por crisis migratoria

El persistente flujo de refugiados hacia el Viejo continente enfrenta a la Unión Europea y Grecia, país que atraviesa una grave crisis económica y que se ha convertido en la puerta de entrada de casi 900,000 migrantes en los últimos 12 meses.

Algunos de los países de la UE han tenido que volver a imponer controles fronterizos ante la nueva oleada de migrantes procedentes de Siria, Afganistán e Irak, y ahora el bloque amenaza expulsar a Grecia si no impone un mayor control a la entrada de refugiados.

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Si en mayo próximo, Grecia no ha conseguido corregir las negligencias cometidas hasta ahora para contener el flujo de refugiados, se quedará aislada de la Unión Europea durante dos años, advierten líderes comunitarios.

La UE trata de salvar el acuerdo de Schengen, que suprimió el control de las fronteras interiores firmado en 1985 y uno de los pilares del bloque para favorecer la libre circulación, el dinamismo económico regional y cultural de Europa.

Los países que forman parte del espacio de Schengen son: Alemania, Austria, Bélgica, Dinamarca, Eslovaquia, Eslovenia, España, Estonia, Finlandia, Francia, Grecia, Hungría, Islandia, Italia, Letonia y Liechtenstein.

Además Lituania, Luxemburgo, Malta, Noruega, Países Bajos, Polonia, Portugal, República Checa, Suecia y Suiza se suman al espacio de Schengen que ahora está amenazado por el movimiento masivo de inmigrantes que tratan de llegar al norte de Europa.

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Ahora, la empobrecida Grecia, acusada de descuidar sus obligaciones en el control de fronteras, enfrentó a la advertencia más cruda de la Unión Europea hasta la fecha sobre las deficiencias en la documentación de la afluencia de refugiados de Oriente Medio.

La crisis de refugiados que llegan a Europa ha convertido a las islas griegas de Kos, Chios y Lesbos en un "caos total", donde los inmigrantes no tienen acceso a alojamiento apropiado, agua ni servicios sanitarios, denunció la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados.

El director en Europa de la organización, Vincent Cochetel, aseguró que las instalaciones puestas a disposición de los inmigrantes en las islas griegas son "totalmente inapropiadas".

"Grecia protege sus fronteras y las fronteras europeas. Lo que no hace ni hará es hundir barcas y ahogar a mujeres y niños porque las leyes europeas e internacionales y los valores de nuestras civilización lo prohíben", señaló una fuente oficial del gobierno griego.

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Atenas juzgó no constructivas estas imputaciones ya que se basan en observaciones desarrolladas en noviembre, mientras que en la actualidad, la situación es muy diferente , advirtió por su parte, la portavoz gubernamental Olga Gerovassili.

Se calcula que desde el comienzo de la crisis más de 850,000 migrantes han entrado en Europa por Grecia atravesando el Mediterráneo desde Turquía. Y este mes se espera la llegada de otros 47,000.

erp