Rubio y Johnson, radicales como Trump

Con las nominaciones de Marco Rubio como secretario de Estado y de Ronald Johnson como embajador de Estados Unidos en México, el presidente electo Donald Trump apuesta a una diplomacia coercitiva y marca la defensa de los intereses nacionales de Estados Unidos en México, puntualizan analistas. 

Aribel Contreras, académica en la Universidad Iberoamericana, destacó que la constante entre los perfiles propuestos es que demostraron lealtad a Donald Trump, son radicales como él, negacionistas a las vacunas, son sumamente neonacionalistas a favor del proteccionismo y están en contra de la migración.

Consideró que Marco Rubio, el primer latino en ser jefe de la diplomacia estadounidense, va a ser un personaje difícil en la relación con México y con quien tendrá que lidiar el canciller Juan Ramón de la Fuente.

Rubio es conocido por sus posturas radicales dentro del Senado, no tuvo buena relación con el expresidente Andrés Manuel López Obrador y es antidictaduras.

Seguridad nacional

Para José María Ramos, profesor-investigador en El Colegio de la Frontera, el nombramiento de Johnson refleja cómo la administración Trump buscó alinear sus prioridades de seguridad nacional con la diplomacia internacional. Además, marcará un punto de inflexión en la relación bilateral.

“Johnson será un intermediario crítico para traducir las políticas del presidente electo Trump en acciones concretas que involucraran a ambos países”, opinó.

Precisó que la experiencia de Johnson en escenarios de alta tensión y su comprensión de dinámicas complejas le otorgaron una perspectiva única para gestionar los desafíos en la frontera. También su perfil contrasta con el de diplomáticos tradicionales, destacando el enfoque de Trump en priorizar la seguridad y la gestión militar en su política exterior bilateral.

La académica de la Universidad Iberoamericana agregó que Johnson es un perfil que ha tenido formación de inteligencia y es un experto en seguridad por lo que va a tener la instrucción de cuidar la seguridad de la frontera con Estados Unidos desde el lado mexicano.

El excoronel fue embajador de Estados Unidos en El Salvador durante el primer mandato de Trump, con la encomienda explícita de reducir el impacto de la delincuencia organizada y los flujos migratorios.

Tras su nominación Trump enfatizó que Johnson trabajará estrechamente con Marco Rubio para promover la seguridad y la prosperidad de Estados Unidos a través de políticas exteriores sólidas de Estados Unidos primero. Y agregó que junto a Johnson se pondrá fin a la delincuencia migratoria y al flujo ilegal de fentanilo y otras drogas.