Descubre la maravilla de Peña de Bernal: Aventura, cultura y enología en 12 horas

Si tienes ganas de salir de la ciudad, pero tienes poco tiempo para hacerlo, puedes seleccionar excursiones de un día, a través de Civitatis. La experiencia inicia en una cafetería en la Colonia Juárez, donde esperas la camioneta que te llevará al recorrido de 12 horas.

Primera Parada

A tres horas de la Ciudad de México se encuentra la Peña de Bernal, la tercera formación monolítica a nivel mundial y que cuenta con una altura de 2,756 metros sobre el nivel del mar. El subir esta gran roca, ayuda a conectarte con la naturaleza ya sea a través de una caminata a paso lento que permite meditar o bien subir la peña a toda velocidad, de tal manera que logras el reto del día.

La Peña de Bernal es una imponente roca de origen volcánico, con una altura de aproximadamente 350 metros. La Peña de Bernal ofrece una vista panorámica impresionante desde la cima, donde los aventureros pueden disfrutar de la belleza del entorno y admirar la ciudad de Bernal desde las alturas ya sea a través de escalada o de rappel. Además de su atractivo paisajístico, la zona también es famosa por sus leyendas y misticismo, atribuidos a la energía especial que se dice emana de este lugar. Es un tesoro natural que cautiva a todos aquellos que la visitan, brindando una experiencia única y memorable.

Segunda Parada

Ya con subir o intentar subir la Peña de Bernal se abre el apetito, un lugar para comer bien y seguir disfrutando de la vista del pueblo y de la gran roca es en la terraza del restaurante Bendito Sabor del Negrito, donde se pueden encontrar: chicharrón de Rib Eye, Anafre Azteca (frijoles, chistorra, queso fresco y totopos), ensaladas, pastas, pizzas, enmoladas, enchiladas queretanas con cecina, tacos en sus diferentes versiones, sin embargo, las gorditas están deliciosas, hay de mole, deshebrada, requesón, ensalada de nopal, entre otras. No se pierdan de unas deliciosas bebidas, ya sea con alcohol o sin alcohol.

Tercera Parada

Sumérgete en el encanto del pueblo de Bernal. Sus calles empedradas y fachadas coloridas te transportarán a otra época, mientras que su arquitectura colonial te deleitará con su belleza.

No olvides probar las delicias del pueblo, los esquites de colores, que son exclusivos de la región, que incluso hay de camarón y de diferentes chiles. Y, por supuesto, no te puedes perder los helados artesanales, los panes y el famoso queso de Bernal, un manjar regional que cautivará tu paladar.

Continúa tu exploración de Bernal visitando las tiendas de artesanías, donde encontrarás recuerdos únicos que representan la rica cultura de la región. Desde textiles hasta cerámicas y joyería tradicional, tendrás la oportunidad de llevar contigo un pedacito del pueblo.

Cuarta Parada

A 30 minutos del pueblo de Bernal, se encuentra Freixenet Querétaro, una aventura cautivadora en el corazón de México. Esta prestigiosa bodega de vinos ofrece vinos espumosos de alta calidad.

Al recorrer sus viñedos, se puede apreciar la belleza de la región y conocer de cerca el proceso de cultivo de las uvas. Los visitantes tienen la oportunidad de adentrarse en las instalaciones y aprender sobre la meticulosa elaboración de los cavas, desde la selección de las uvas hasta la fermentación y el envejecimiento.

La experiencia enológica culmina con una degustación de los distintos vinos espumosos y degustación de tapas, permitiendo a los visitantes deleitarse con la explosión de sabores y aromas únicos de la región y del maridaje.

Con una combinación de historia, pasión y excelencia enológica, la experiencia en Freixenet Querétaro es un verdadero placer para los amantes del vino y una oportunidad única para explorar el arte de la enología en México.