Diabetes mal controlada aumenta el riesgo de complicaciones prematuras

El componente genético de los mexicanos aunado con los problemas de obesidad, malos hábitos alimenticios y la falta de actividad física son factores determinantes en el incremento de casos diagnosticados con diabetes, lo cual representa un grave problema de salud pública para el país.

En entrevista con El Economista el doctor Valentín Sánchez Pedraza, presidente del Colegio de Endocrinólogos de México, explicó que la diabetes es una enfermedad crónica que si bien no tiene cura si se puede controlar si se lleva un correcto monitoreo de la enfermedad y seguimiento médico.

¿Por qué se da esta enfermedad? Hay dos componentes principales, uno es el aspecto genético, es decir estamos programados o no a que las células que producen insulina dejen de funcionar y en esta parte todos los latinos o mexicanos estamos programados genéticamente a que nuestras células lleguen a fallar si es que existe un alto consumo de azúcar por un largo plazo”, explica.

“El otro factor para que se desarrolle la diabetes es la obesidad. Por lo tanto, si no cambiamos los malos hábitos, sabiendo que genéticamente estamos hechos para padecer diabetes en el momento en que se eleva el azúcar de rango normal, este empieza a ser tóxico para el organismo y vienen las complicaciones”.

De acuerdo con el especialista existen varios tipos de diabetes (Tipo I, Tipo II y gestacional)  la Tipo II es la más común, y se presenta cuando el cuerpo es incapaz de producir insulina y se acumula la glucosa en la sangre. Representa la mayoría de los casos, y se manifiesta generalmente en adultos, muchas veces con obesidad.

Por su parte, la doctora Tessy López Goerne, científica mexicana especializada en los campos de la Nanotecnología y Nanomedicina, destacó la importancia de contar con campañas eficaces para enfatizar la importancia de los buenos hábitos alimenticios y la prevención.

“México es uno de los países que consumen en exceso los carbohidratos, las garnachas, manteca, exceso de azúcar como en los refrescos, otro gran problema”, enfatiza la también catedrática e investigadora de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).

Mas del 50% no lleva a cabo seguimiento de su enfermedad por ignorancia, pobreza extrema, antojos, costumbres que se heredan de generación en generación, son muchas cosas que aunado con que muchas personas además no tienen acceso al sistema de salud pública hacen más grande el problema”.

De acuerdo con la especialista, cuando la enfermedad no es correctamente tratada  se corren varios riesgos con el tiempo, ya que se pueden dañar otras partes del cuerpo, como los ojos, nervios, se pueden sufrir ataques cardíacos, derrames cerebrales. Con lo que respecta al daño en nervios que produce la diabetes se puede perder la sensación en los pies y una herida pequeña no sana fácilmente. Y es en este último punto donde la doctora López Goerne lleva más de 15 años de investigación.

Pie diabético

Los problemas en los pies son comunes en personas con diabetes y pueden ocurrir con el tiempo cuando los niveles altos de azúcar en sangre dañan los nervios y los vasos sanguíneos de los pies. Este daño, llamado neuropatía diabética, puede provocar entumecimiento, dolor o pérdida de sensibilidad en los pies y al no sentir dolor, es posible que no se dé cuenta si tiene una lesión que puede infectarse. Si se convierte en gangrena o una úlcera en el pie que no mejora con el tratamiento, es posible que se necesite una amputación.

La doctora Tessy López Goerne al ser pionera en el uso nanomedicina catalítica desarrolló una investigación referente al tema lo que dio como resultado un producto que con nanopartículas diseñadas realizan una limpieza profunda en heridas difíciles de cerrar. Su función principal es eliminar la infección y con esto iniciar el proceso natural de cicatrización.

“Mi hermana, diabética Tipo I, tenía el problema de pie diabético al punto que los médicos querían amputarle su pierna, yo ya tenía mucho tiempo de investigación, mi línea principal era cáncer, pero mi línea lateral era diabetes, en especial pie diabético, así que invertí parte de mi tiempo en esta investigación”, narró en entrevista para El Economista.

La investigación tuvo como resultado un gel elaborado a base de nanotecnología que sirve específicamente para curar heridas difíciles de cerrar. “Este producto es una alternativa viable en el tratamiento de la úlcera diabética, debido a un mecanismo que permite mantenerla seca y, al mismo tiempo, inhibir el crecimiento de bacterias mediante un efecto biocatalítico”.

Actualmente el producto se encuentra en proceso de conseguir el registro de Cofepris para poder clasificarlo como un dispositivo médico y comercializarlo de esta manera.