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El reto de la sustentabilidad en el transporte está en ruta

El desarrollo de vehículos eléctricos con baterías ya se encuentra en apogeo, la tendencia son las celdas de hidrógeno para las operaciones de larga distancia

Fuente: Cortesía

La Iniciativa Climática de México identifica que el sector transporte contribuye con cerca de una cuarta parte de las emisiones de los gases efecto invernadero (GEI). Al tiempo, el sector del autotransporte, tanto en carga como en pasaje, es el modo de transporte dominante y protagónico, con una participación del más de 90% en el caso de movilidad de personas y por arriba de 55% en el de mercancías.

El mercado del autotransporte en México va en la dirección de la profesionalización, seguridad y eficiencia operativa. Sin embargo, hablando específicamente de la eficiencia operativa, la reducción de gastos, el crecimiento de la productividad y la responsabilidad social, son los rubros que considero más importantes en este momento del sector. El tema más importante es el de la reducción de gases contaminantes y el cuidado al medio ambiente, por lo que estaremos viendo muchas acciones dirigidas en este sentido”, comentó Lorena Martínez, directora general de BYDeléctrico, master dealer de BYD para México en entrevista con El Economista.

A nivel global el camino siguiente sobre todo en el mercado que está más alineado con nuestro país, Estados Unidos, es el desarrollo de vehículos eléctricos con baterías (BEV) para las operaciones de última y media milla y la de celdas de hidrógeno para las operaciones de larga distancia. “Sin embargo, para ambos casos, la parte de infraestructura de recarga, la normatividad y los apoyos de gobierno, son los retos por resolver”, dijo Lorena Martínez.

En su perspectiva, México debe adoptar las mejores prácticas de países como Estados Unidos, en el sentido del desarrollo de normatividad, no sólo para vehículos, sino para cargadores y todo lo específico a la infraestructura de recarga eléctrica. Otro punto esencial, son los planes de apoyo e incentivos que están motivando la aceleración hacia la transición a la electromovilidad.

En el escenario internacional, diversos países por cumplimento de sus compromisos de descarbonización del sector transporte, impulsados por la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, están impulsando acciones como las antes mencionadas.

El objetivo de la Conferencia es reducir la temperatura mundial en este siglo muy por debajo de los 2 grados Celsius y proseguir los esfuerzos para limitar aún más el aumento de la temperatura a 1.5 grados.

Infraestructura, el reto

El desarrollo de tecnologías cero emisiones en la industria automotriz está disponible en diversidad de aplicaciones. No obstante, el reto se encuentra en la generación y distribución de la energía, junto con las normatividades y políticas públicas, como la vía para acelerar la transición a la electromovilidad.

“Los vehículos cero emisiones, hablando de los eléctricos, requieren de una infraestructura de recarga robusta, pública y privada. Al mismo tiempo, se necesita normatividad para conectores en vehículos y cargadores, mientras que por parte de las unidades, se necesitan mayores autonomías e incentivos u apoyos de gobierno”, agregó la directiva.

En la perspectiva de la directora general de BYDeléctrico, el reto más importante es garantizar el ecosistema para que los vehículos puedan realizar el trabajo, que debe estar conformado por 4 grandes pilares: el vehículo eléctrico como tal, la infraestructura eléctrica (que incluye la correcta capacidad instalada de energía, líneas de distribución y cargadores), herramienta financiera y soporte postventa. 

En el caso de BYDEléctrico, el tractocamión eléctrico Q3MA, tiene una autonomía de 240 kilómetros a su máxima capacidad de arrastre, con una recarga eléctrica de las baterías. “Sin embargo, la operación de cualquier vehículo eléctrico está limitada por su autonomía en conjunto con la capacidad de recarga eléctrica. Esto quiere decir, que entre mayor sea la cobertura de la red de infraestructura eléctrica, el vehículo podrá recorrer mayores distancias”, concluyó Lorena Martínez.

Coordinadora de Operación Editorial de Suplementos y Ediciones Especiales de El Economista. Licenciada en Economía por la Universidad Nacional Autónoma de México. Estudió una especialización en Periodismo Económico en la Universidad de Miami, auspiciada por la Fundación Reuters. Ganadora del premio por la "destacada cobertura en finanzas verdes", entregado por la BMV y el Consejo Consultivo de Finanzas Verdes. Ha sido analista de mercados, editora de finanzas y creadora de ranking de negocios, responsabilidad social y mercados, y ha trabajado en la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas, Reforma, Excélsior, Mundo Ejecutivo, Expansión, Fortuna, Infosel y Economática.

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