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Mujeres mezcaleras que transforman una industria milenaria
Desde Puebla, las mezcaleras están marcando un hito en una industria históricamente dominada por hombres, demostrando fortaleza y sororidad
El mezcal, una bebida ancestral que ha cautivado al mundo, tiene en las mujeres sus nuevas protagonistas. En un sector que tradicionalmente ha sido liderado por hombres, las mujeres estamos redefiniendo el papel de la industria mezcalera, abriéndose camino con determinación y compromiso, así lo consideró Edna Viveros, presidenta de Hijas de Maguey, mujeres del agave del estado de Puebla en entrevista con El Economista.
Explicó que desde los campos de agave hasta las destilerías, ellas no sólo son responsables de mantener vivas las prácticas artesanales de producción, sino también de innovar en la promoción y comercialización de sus marcas.
“Ejemplos como los mezcales Agavesos, Amantes y Amados y Máxima han destacado en concursos internacionales, obteniendo medallas de oro y gran oro, evidenciando la calidad y el esfuerzo detrás de cada botella”.
Edna Viveros representa a 63 mujeres, todas trabajando en proyectos dentro de la cadena: Maguey Mezcal y aseguró que la clave de su éxito radica en la sororidad y el trabajo colectivo. “Mujeres como las productoras de los mezcales Coatepec, Mi Ofrenda y Tesoro de Atlapulco han demostrado que, unidas, pueden enfrentarse a los desafíos de una industria altamente competitiva, preservando al mismo tiempo la riqueza cultural del mezcal poblano”.
Su trabajo va más allá de la producción de la bebida; estas mujeres también están comprometidas con el empoderamiento de otras productoras, y con la difusión de la cultura del mezcal en México y el extranjero.
Bajo el lema “Mano con mano, con la sororidad como bandera”, no solo están generando oportunidades económicas, sino también elevando la visibilidad del mezcal como un símbolo de identidad y orgullo mexicano.