Aumenta preocupación por situación de Grecia

Estimaciones de diversos analistas indican que la posible salida de Grecia de la zona euro causaría una pérdida por 320,000 millones de euros aproximadamente a la Unión Europea (UE), provocando un contagio sistémico entre los 28 miembros que absorberían esta carga.

El problema no es la amortización de la deuda que dejaría Grecia, sino que algunos países miembros no se encuentran en las condiciones para añadirla a sus endeudadas economías, como España e Italia.

Si un miembro sale de la UE, el resto tiene que absorber los costos , dijo Stavros Zenios, miembro de la junta de directores del Banco Central de Chipre.

Además, el Banco Central Europeo (BCE) posee alrededor de 18,000 millones de euros en bonos griegos, que probablemente valgan solo una fracción de su precio nominal en caso de que el país deje la zona euro.

El gobierno del primer ministro Alexis Tsipras busca flexibilizar los términos de sus deudas para pagar. Sin embargo, la liquidez con la que cuenta no le es suficiente para enfrentar sus pasivos.

El lunes Tsipras ordenó a diversas entidades del sector público que transfieran fondos ociosos a su banco central en un esfuerzo para hacer frente a sus obligaciones de mayo de este año, la cual deberá pagar al Fondo Monetario Internacional (FMI) cerca de 1,000 millones de euros, correspondientes a los vencimientos del primero y el 12 de mayo, por 200 y 760 millones de euros, respectivamente.

Pero esto no es todo, de pagar dichas obligaciones, el país heleno también tiene pasivos por 9,000 millones de euros al Banco Central Europeo, con vencimiento en julio y agosto.

El FMI y los acreedores de Grecia han rechazado prorroga alguna para el pago de sus pasivos, además de congelar en agosto del año pasado los fondos restantes por 7,200 millones de euros de los 240,000 acordados en el 2010 por su rescate financiero, hasta que haya mejores reformas por parte de las autoridades griegas.

Gerda Hasselfeldt, miembro de los aliados conservadores de la canciller alemana Angela Merkel, declaró al periódico Die Welt que un tercer programa de rescate para Grecia no será llevado a cabo y agregó: Si los planes (griegos) no se hacen más concretos, no veo ningún margen aquí .

Pero el gobierno heleno se aferra a mantener las pensiones y salarios gubernamentales intactos, situación que está ahogando sus finanzas y que al FMI junto a otras instituciones las mantiene preocupadas y exigen un recorte agresivo a estos gastos para otorgarles los fondos restantes de su rescate.

Grecia debe llegar a un acuerdo marco de financiamiento con sus prestamistas en una reunión de ministros de Finanzas de la zona del euro el 24 de abril.

Mientras tanto, el rendimiento del bono a 10 años de Grecia repuntó 166 puntos base durante la semana pasada a 12.90% desde el 2 de diciembre. Mientras que el rendimiento del bono a tres años de Grecia repuntó 608 puntos base durante la semana para ubicarse en 26.75%, según datos de Grupo Financiero Santander. (Con información de Reuters)