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Bitcoin, más volátil y seductor que el mismo oro
La crisis financiera del 2008 iniciada con el colapso de las hipotecas subprime en Estados Unidos fue la tormenta perfecta para que se diera el nacimiento de la moneda digital.
Pese a ser tan volátil y riesgoso como algunos gases químicos, el bitcoin pasó de ser parte de la cartera de sólo algunos inversionistas especializados a llenar grandes espacios publicitarios en la prensa y medios especializados que buscan atraer desde el ama de casa hasta el empleado o ejecutivo que buscan incrementar su ahorro o riqueza de forma rápida y extraordinaria.
El vertiginoso crecimiento de la criptodivisa en la segunda mitad del 2017 fue sin duda el acontecimiento del año en los mercados financieros. De acuerdo con el portal Blockchain, cada bitcoin alcanzó un precio de 19,499 dólares el 16 de diciembre del 2017, nivel inimaginable siquiera para los pioneros del mercado, en ese punto su rendimiento respecto al precio registrado un año atrás era de 2,395%, repunte que en apariencia celebraba su debut en uno de los mercados de futuros más importantes del orbe.
Sin embargo, luego de alcanzar su nivel más alto, algunos inversionistas decidieron que era momento de realizar parte de las utilidades acumuladas por la euforia de la criptodivisa y empezaron a liquidar porcentaje de su posición, proceso que motivó un brusco movimiento de baja que en los últimos 11 días acumula una caída de 20%, magnitud que de registrarse en cualquiera de los grandes mercados establecidos habría ganado calificativos de catástrofe o colapso.
Pero, esta fuerte caída, tras un vertiginoso ascenso, no es nueva en el precio del bitcoin, ya en noviembre del 2012, y particularmente en el 2015, registró fuertes caídas que prácticamente la volvieron polvo, pero de las que finalmente se sobrepuso y para el 2017 alcanzó su precio máximo, pero que por otra parte nos recuerda el principio básico de los mercados financieros, de que “riesgo y rendimiento van de la mano”, es decir, si se quiere un altísimo rendimiento, se tendrá que asumir un riesgo de la misma magnitud y viceversa.
Un poco de historia
Para superar la crisis financiera en el 2008 iniciada con el colapso de las hipotecas subprime en EU, los principales bancos centrales en el mundo inician una política monetaria extraordinaria e implementan medidas no convencionales para inyectar liquidez en el sistema financiero. La recesión global y la crisis de la deuda soberana en los países de la periferia europea hacen que la solidez de las divisas fiduciarias respaldadas por los gobiernos empiecen a ser cuestionadas, en este contexto, la crisis financiera es la tormenta perfecta de la que surge el bitcoin.
El bitcoin resolvió de forma innovadora el problema planteado en las monedas digitales creando una cadena de bloques, una especie de libro de contabilidad público, en el que todas las transacciones quedan anotadas y son verificadas por una extensa y descentralizada red de ordenadores. En agosto del 2008 se registra el dominio Bitcoin.org y, en octubre de ese mismo año, se publica el primer documento que explica el diseño del bitcoin, lo demás es lo que ahora empezamos a mirar, con asombro.
