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Claroscuros para el peso, más riesgos para el 2021
Los contratos especulativos de posiciones de futuro del peso en Chicago suman 14 semanas a la baja.
La política monetaria de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos y las presiones inflacionarias, son algunos de los factores externos que presionan al peso frente al dólar.
Los contratos netos especulativos de posiciones de los futuros del peso en el Chicago Mercantile Exchange (CME) acumulan 14 semanas a la baja. Al viernes 25 de junio se ubicaron en 28,600 contratos, su peor nivel desde el 19 de marzo cuando había 29,500 contratos en contra de la moneda mexicana.
James Salazar, subdirector de Análisis Económico y Bursátil de CIBanco, dijo que los recientes comentarios del presidente de la Fed, Jerome Powell, en el sentido de adelantar los cambios de política monetaria para 2023, profundizó las apuestas en contra del peso.
“El dato más reciente coincide con la presión del tipo de cambio que se registró la semana pasada de un nivel de 20.70 tras el anuncio de la Fed”, dijo.
“Es posible que las próximas semanas se mantenga en terreno negativo, pero más cercano a los 5,000 contratos negativos, al menos en las próximas dos semanas, sin embargo, este indicador tiene un efecto de rezago respecto a la cotización real del tipo de cambio”, indicó el analista de CIBanco.
Resistente
En el marco del Día Fibra Educa, los especialistas del panel “Perspectivas Económicas de México”, comentaron que la moneda mexicana ha resistido dada la debilidad del dólar y se ha movido en función de factores externos; sin embargo, para el cierre de este año se prevé que el tipo de cambio cerraría en niveles de 20.20 a 21.0 pesos por dólar.
Gabriel Casillas, director general adjunto de Análisis Económico en Banorte, estimó que el tipo de cambio terminaría el año en 20.20 pesos por dólar.
Alonso Cervera, economista en jefe para América Latina de Credit Suisse, dijo ver un tipo de cambio en niveles de 20.50 a 21 pesos por billete verde al término de este 2021.
“No veo muchas novedades en el ámbito local que mueva mucho al tipo de cambio. Para finales de año va a bailar al son que le toquen los mercados externos. Perdemos competitividad estando en 19.70 pesos por dólar; un tipo de cambio más débil sería mejor”, explicó en su participación.
“De corto plazo todo se ve muy bien, pero a mediano plazo es cuando podemos preocuparnos de que no se esté reflejando realmente ese mediano plazo en donde a lo mejor nuestro Producto Interno Bruto (PIB) potencial es menor al 2.3%, que es el nivel que hemos estado creciendo en los últimos 40 años”, señaló Casillas.
James Salazar dijo que “la apreciación es temporal, porque después viene el programa de compra mensual de bonos de la Fed y ese indicador será el que definirá la tendencia del tipo de cambio para la segunda mitad del año, lo que probablemente veremos arriba de 20.50 unidades en los siguientes meses”.
Concluyó que es probable que las posiciones netas del peso en el CME sigan negativas. “Quizá en los próximos días se tranquilice la situación, pero en cuanto la Fed comience a dar señales sobre el tema de compra mensual de bonos, las apuesta en contra de la mayoría de las monedas emergentes sean más negativas”.