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Difícil semana para el tipo de cambio; cerca de regresar a las 17 unidades por dólar

La divisa mexicana operó bajo presiones la semana terminada el 21 de junio, rozando las 17 unidades por dólar y con su mayor depreciación semanal desde marzo pasado, a la espera del anuncio de política monetaria que hará este miércoles la Fed, con las mayores apuestas del mercado hacia un último aumento en la tasa de interés de referencia.

La divisa mexicana operó bajo presiones la semana terminada el 21 de junio, rozando las 17 unidades por dólar y con su mayor depreciación semanal desde marzo pasado, a la espera del anuncio de política monetaria que hará este miércoles la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos, con las mayores apuestas del mercado hacia un último aumento en la tasa de interés de referencia.

La moneda local se depreció 1.50%  frente al dólar en las últimas cinco sesiones, del 17 al 21 de junio, su cierre semanal más bajo desde la semana terminada el 10 de marzo. Así, vuelve a recortar su ganancia anual de 12.90% o 2.52 centavos.

El viernes, el tipo de cambio cerró en 16.9920 unidades por dólar, equivalente a un retroceso de 0.61% o 10.21 centavos, de acuerdo con datos del Banco de México (Banxico). Durante las operaciones alcanzó un máximo de venta de 17.000 pesos y un mínimo de 16.9090 pesos.

Semana fuerte para el dólar

La debilidad del peso, explicaron analistas, se debe a la fortaleza del dólar, que medido por el Índice DXY, el cual compara el desempeño de la divisa estadounidense frente a una canasta de seis monedas fuertes, subió el viernes 0.19% para completar un cierre semanal de 1.17%, a 101.08 unidades. En el año cae 2.70 por ciento.

Lo anterior en la antesala de conocer la decisión de política monetaria de la Fed, donde “el mercado descuenta con un 99% de probabilidad, una subida de 25 puntos base a la tasa de interés, aunque la atención estará en los comentarios acerca de qué puede pasar en el futuro”, dijo James Salazar, subdirector de Análisis Económico en CI Banco.

“Lo observado en los dos últimos días en la cotización del peso no necesariamente implica un cambio de tendencia del comportamiento positivo de la moneda, pero sí refleja lo volátil que puede llegar a ser por ajustes temporales en la percepción de los operadores”, agregó.

Gabriela Siller, directora de Análisis en Banco Base, comentó que la depreciación del peso se debe al fortalecimiento semanal del dólar, siendo el primer aumento tras caer 2.46% en las dos semanas anteriores y por el efecto rebote, tras alcanzar un mínimo en el año.

Pero también refleja la indecisión del mercado respecto a la trayectoria del peso, ya que se ha apreciado significativamente “por expectativas y no por fundamentales económicos”.

“El tipo de cambio podría continuar con la tendencia de baja si la Reserva Federal se muestra menos restrictiva o si Jerome Powell, el presidente del banco central, da señales que concluyó el ciclo alcista”, destacó y dijo que se espera el dato de inflación en México de la primera quincena de junio.

judith.santiago@eleconomista.mx

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