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Dólar hoy: precio del 11 de mayo de 2023
El peso retrocedió desde su mejor nivel en casi seis años en un entorno de aversión al riesgo tras la publicación de débiles cifras económicas de Estados Unidos.
El peso mexicano retrocedió frente al dólar estadounidense este jueves. La divisa local cayó ante un fortalecimiento del billete verde, tras la divulgación de cifras en Estados Unidos que dieron más señales de desaceleración en la mayor economía mundial.
El tipo de cambio terminó esta jornada en el nivel de 17.5865 unidades por dólar. Contra un cierre de 17.5582 unidades ayer, con datos oficiales del Banco de México (Banxico), el peso retrocedió 2.83 centavos, equivalentes a una pérdida de 0.16 por ciento.
El cruce operó en un rango acotado entre un máximo de 17.7008 unidades y un mínimo de 17.5352 unidades, su mejor nivel desde julio de 2017. El Índice Dólar (DXY), que compara al billete verde con seis divisas fuertes, ganaba 0.59% a 102.08 unidades.
El número de nuevas solicitudes de subsidios por desempleo en Estados Unidos subió la semana pasada a 264,000 desde 242,000, una muestra de que los esfuerzos de la Reserva Federal para enfriar la economía y controlar la inflación surten efecto.
El índice de precios al productor para demanda final de Estados Unidos subió 0.2% en abril. Estos datos también refuerzan las apuestas de que el banco central podría poner un freno, por ahora, al ciclo de alza de tasas, que están entre 5% y 5.25 por ciento.
"En el mercado cambiario también se observa un aumento de la aversión al riesgo", dijo la firma local Banco Base en una nota de análisis. No obstante, añadió que los indicadores sugieren que la tendencia de baja para el tipo de cambio toma fuerza.
En el ánimo de los inversionistas pesaron también renovadas preocupaciones en torno a algunos bancos regionales de Estados Unidos. PacWest Bancorp se desplomó un 22.7%, arrastrando en Wall Street a otros pequeños y medianos prestamistas.
Los operadores continúan atentos ante una creciente incertidumbre sobre el techo de la deuda estadounidense. El gobierno tiene sólo semanas para caer en impago.