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Embraer cerró junio con una pérdida semestral de 607 millones de dólares
Embraer registra pérdidas por su ruptura con Boeing y por la caída de ventas de aviones comerciales a causa de la pandemia de coronavirus.
Embraer registró una pérdida neta de 315.3 millones de dólares en el segundo trimestre del año, afectada por su ruptura con Boeing y por la caída de ventas de aviones comerciales a causa de la pandemia de coronavirus, informó el fabricante brasileño.
Las pérdidas del periodo abril-junio de 2020 se suman a las de 292 millones de dólares del primer trimestre, cuando la covid-19 empezaba a golpear a Brasil, con lo cual el rojo hasta junio del tercer fabricante mundial de aviones totaliza 607.3 millones de dólares.
En el segundo trimestre de 2019, Embraer había cerrado con un resultado positivo de 7.2 millones de dólares.
El sector más afectado por la crisis es el de la aviación comercial, el principal de la firma de Sao José dos Campos, que tuvo un derrumbe de 82.8% interanual.
En ese periodo, Embraer entregó 17 aparatos, cuatro de ellos del sector comercial y trece de tipo ejecutivo. En el segundo trimestre del año pasado, había entregado 26 aparatos comerciales y 25 de tipo ejecutivo.
En el primer semestre, hubo apenas 9 entregas de aparatos comerciales, frente a 37 en el mismo periodo de 2019.
En su comunicado, Embraer indicó que "debido a la incertidumbre relacionada con la pandemia de covid-19, las estimaciones financieras y de entregas para 2020 siguen suspendidas".
La empresa explicó además que se vio "afectada negativamente" por su ruptura con Boeing.
El mayor fabricante mundial de aviones indicó a fines de abril que renunciaba a adquirir la rama civil de Embraer, una transacción que estaba en su fase final y por la cual debía pagar 4,200 millones de dólares.
La empresa estadounidense alegó que estaba en su derecho de no ejecutar el pacto porque Embraer no cumplía las condiciones estipuladas. Embraer niega esas alegaciones y sostiene que Boeing puso fin al proceso "indebidamente".
Con la adquisición de Embraer, Boeing pretendía competir con su rival europeo Airbus, que aliado al canadiense Bombardier, en el segmento de aviones regionales.