Lectura 5:00 min
México, rezagado en emisiones de bonos ASG, dice UBS
Aunque el país está en el tercer lugar en América Latina en colocación de deuda verde, queda a deber cuando se trata de empresas en Bolsa.
México tiene un largo camino por recorrer para alcanzar a otros países de América Latina y otros mercados emergentes en lo referente a emisión de bonos con características ambientales, sustentables y de gobierno corporativo (ASG), pese a que se ha movido en la dirección correcta en términos de concientización y adopción.
El estudio “Loable progreso de ESG; cuidado con los riesgos. Invirtiendo en México”, realizado por el banco suizo de inversión UBS, dice que la reforma constitucional en materia eléctrica presentada al Congreso, puede significar un “gran revés”, para los esfuerzos ambientales de México, tanto en la competitividad como en el estado de derecho.
UBS explica que pese a los avances logrados en los últimos años, México se ha retrasado en el conocimiento y adopción de prácticas ambientales, sociales y de gobernanza (ESG), sobre todo en el ámbito empresarial.
El banco suizo dice que de las 88 empresas mexicanas bajo su cobertura que cotizan en Bolsa, el 58% están atrasadas en adopción de criterios ASG en comparación con el 46% de las 160 emisoras brasileñas.
Un estudio de MSCI citado por UBS arrojó que la proporción de empresas rezagadas en temas ASG dentro del principal índice de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), el S&P/BMV IPC, cayó de 60 a 40% entre 2015 y 2020.
Para UBS, uno de los momentos clave en la adopción de criterios ASG en México fue cuando la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar) estableció que las Administradoras de Fondos para el Retiro (Afores) tendrían que adoptar dichos criterios en sus estrategias de inversión a partir de enero del 2022, obligatoriamente.
El banco espera que las Afores, que administran activos equivalente al 20% del Producto Interno Bruto (PIB) de México, comiencen el próximo año a presionar a las empresas y proyectos donde invierten los recursos de los trabajadores, a que divulguen información más detallada sobre sus avances en materia de ASG.
El Banco de México (Banxico) también ha jugado un papel fundamental en la promoción de la integración de criterios ASG. Para ello ha publicado informes que incluyen recomendaciones sobre cómo identificar y monitorear riesgos derivados de la exposición a activos directamente afectados por proyectos relacionados con el clima.
De hecho, Banxico ha sido pionero en invertir parte de sus reservas internacionales en bonos verdes, excluyendo los activos que no están alineados a criterios ASG.
Explica UBS que México también ha avanzado en la implementación de la Agenda 2030 de Naciones Unidas. Incluso, el país fue pionero a escala mundial en la emisión de un bono soberano bajo los criterios de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) en septiembre del 2020. El bono soberano a siete años, emitido con un cupón de 1.35% fue por por 750 millones de euros.
Hubo otro bono soberano ODS a 15 años en julio de este año por 1,250 millones de euros con una tasa de 2.25 por ciento. Dado el éxito de estas dos colocaciones, el gobierno ya planea emitir otro bono soberano ODS en el mercado local.
Las inversiones ASG presentan desafíos y oportunidades únicos para México. La inversión verde del país está lejos de ser suficiente para cumplir sus objetivos de cambio climático, y los altos costos de financiamiento (en comparación con los de las economías desarrolladas) siguen siendo un obstáculo para seguir avanzando.
A pesar de todos los esfuerzos para asegurar un futuro más verde, México enfrentaría un gran revés de aprobarse la reforma constitucional de electricidad que actualmente se encuentra en el Congreso, a decir de UBS.
Tercer lugar
México ocupa el tercer lugar en la emisión de bonos verdes, sociales y sostenibles en América Latina y el Caribe, detrás de Chile y Brasil, de acuerdo con The Climate Bond Initiative.
El reporte 2021 de CBI arrojó que se duplicó la emisión en la región, pues a septiembre del 2019 se emitieron 13,600 millones de dólares de esos instrumentos y para junio del 2021 fueron 30,200 millones.
México es el tercer mercado que emitió un bono verde, después de Perú y Brasil, además ocupa la tercera posición en volumen emitido con 11,000 millones de dólares en estos temas, informó el organismo.
Desde 2019, el país tuvo 11 emisiones con entidades como FIRA, Viviendas Vinte, Coca-Cola FEMSA (KOF), Fibra Prologis, Cadu inmobiliaria, Fibra Storage, entre otros.
México representa el 37% de los bonos verdes, el 29% de los bonos vinculados a la sostenibilidad y el 28% de los bonos sostenibles. En el rubro de bonos sociales solo participó con el 6 por ciento.
El CBI publicó que FIRA, un fideicomiso especializado en apoyar al campo emitió un segundo bono por 159 millones de dólares; Vinte, una desarrolladora de vivienda obtuvo un préstamo por 20 millones de dólares para financiar construcciones verdes. KOF recaudó 705 millones de dólares para eficiencia energética, Fibra Prologis captó 375 millones de dólares para financiar energía eólica, solar, entre otros.
Cadu captó 25 millones de dólares para financiar construcciones con bajas emisiones de carbono. El de FIRA es el único bono certificado por CBI que financia el uso sostenible de la tierra. El 30% de las emisiones fueron en pesos y 70% en dólares.