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Nearshoring, la expectativa del mercado sonríe al peso
La tendencia empresarial de reubicar las operaciones y la producción en los países cercanos ha beneficiado a México, vecino de la mayor economía mundial, lo que empuja a la moneda.
El nearshoring ha sido un factor crucial en el fortalecimiento del Superpeso en 2023. Esta tendencia industrial ha tenido influencia indirecta en el precio del dólar, en gran medida por las percepciones en el mercado.
¿Por qué el nearshoring genera tanta expectativa? Comencemos por definirlo: el nearshoring es una estrategia empresarial en la que se producen los artículos de consumo en el lugar más próximo a su consumo, para reducir costos logísticos. Es una estrategia de la década de 1990 que cobró mayor relevancia en los últimos años y que influye en múltiples aspectos económicos y financieros.
Debido a que los costos laborales comenzaron a subir en las regiones que eran consideradas como destinos para las fábricas (como los países de Asia), las empresas buscaron opciones más rentables y más próximas a sus mercados de consumo (como Estados Unidos).
La velocidad de producción se mantiene y los tiempos de entrega y de respuesta a la demanda disminuyen. Los negocios se aceleran.
Expectativas de crecimiento
Entender cómo el nearshoring beneficia al peso requiere primero comprender las formas en que influye la economía en los mercados. Cuando una economía se fortalece, lo normal es que su moneda también lo haga y las expectativas de los operadores son el motor.
Una economía sólida eleva la confianza en su divisa. Las inversiones tienen un panorama más favorable. En el contexto del nearshoring, el hecho de que México se ubique cerca de la mayor economía mundial genera entusiasmo.
Con la guerra comercial entre Estados Unidos y China, además de otros factores globales que afectaron las cadenas de suministro, la cuota de mercado que cedió el gigante asiático en Estados Unidos la tomaron principalmente su socio México y Vietnam.
México llama la atención de las empresas que lo consideran un país de una entrada para América Latina y un puente para Estados Unidos. Da acceso a los océanos Pacífico y Atlántico y su infraestructura aeroportuaria, vías férreas y autopistas ayudan a reducir los costos.
El nearshoring y los flujos
Un efecto directo en el tipo de cambio que genera el nearshoring y que es muy similar a lo que ocurre con las remesas es una mayor entrada de flujos a México en diversas monedas.
“Si hablamos de flujos, el nearshoring también hace que entren otras monedas a México y principalmente dólares. Cuando vemos al país como un hub o centro de manufactura, es catalizador para el peso por la entrada de dólares”, explica Juan Carlos Cruz Tapia, docente de la Escuela Bancaria y Comercial (EBC).
Aunque no todo el gasto se hace de esta manera, como en la compra de maquinaria que suele ser dólar contra dólar, buena parte de la inversión sí llega así. Lo hemos visto en los planes que se tienen en la región del Bajío y en la planta de Tesla en Monterrey”.
El círculo virtuoso se completa, añade Cruz Tapia, cuando las empresas requieren mano de obra y le pagan salarios competitivos, con lo que la economía de los hogares se fortalece. El dinero entra en el consumo y, a pesar de un costo de inflación, la economía mejora.
