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Peso, con mayor depreciación desde 2021
El peso tuvo un débil desempeño en el tercer trimestre de este año, al registrar la segunda mayor depreciación desde el mismo periodo del 2021, presionado por las políticas monetarias restrictivas, indicaron especialistas.
El peso tuvo un débil desempeño en el tercer trimestre de este año, al registrar la segunda mayor depreciación desde el mismo periodo del 2021, presionado por las políticas monetarias restrictivas, indicaron especialistas.
De julio a septiembre de este año, el tipo de cambio se depreció 1.82% o 31.23 centavos, al terminar en 17.4279 pesos por dólar desde los 17.1156 unidades con las que empezó dicho periodo, de acuerdo con datos del Banco de México (Banxico).
Con ello marcó la segunda mayor depreciación desde el tercer trimestre del 2021, cuando cedió 3.50% frente a su par estadounidense.
Gabriela Siller, directora de Análisis en Banco Base, explicó que la depreciación del peso se explica por la especulación de que la Reserva Federal incrementará la tasa de interés antes de que termine el año y que la mantendrá en un nivel más elevado de lo anticipado en 2024.
El trimestre fue negativo pues fue cuando el peso rompió con su racha ganadora de siete meses consecutivos. Septiembre fue el mes más débil del año para la cotización del peso pues se depreció 2.18% y agosto marcó su primera pérdida en 2023, al retroceder 1.86 por ciento.
Fue también en este periodo cuando el tipo de cambio registró su mejor nivel desde diciembre del 2015, al posicionarse por debajo de los 17 pesos por dólar.
Lo anterior pasó en dos momentos. El 12 de julio el peso cerró en 16.8870 unidades, aunque el 2 de agosto se colocó por encima de los 17 enteros. Para el 22 de agosto bajó a 16.9181 pesos, pero para el 31 de agosto se situó en 17.0552.
Gabriela Siller explicó que otros factores que debilitaron al peso fueron la aversión al riesgo marcada por la desaceleración económica en China, ante indicadores débiles publicados en agosto como la Inversión Extranjera Directa del segundo trimestre que mostró un flujo de 4,900 millones de dólares, siendo el menor para cualquier trimestre desde que inició la serie en 1998.
“China es la segunda mayor economía del mundo, por lo que señales de un estancamiento económico generan aversión al riesgo, principalmente en activos de economías emergentes o de economías productoras de materias primas", dijo.
Otro factor que generó aversión al riesgo fue el recorte de la calificación crediticia de Estados Unidos por parte de la calificadora Fitch, de AAA a AA+, debido al alto endeudamiento, el deterioro de la gobernanza y los acuerdos de último minuto para elevar el techo de la deuda, lo que ha erosionado la confianza en el manejo fiscal del gobierno”, agregó.
Déficit presupuestal
En temas internos, el peso sufrió las preocupaciones sobre el déficit presupuestal (por 1.7 billones de pesos, equivalente al 4.9% del Producto Interno Bruto, el mayor desde 1988) propuesto en el Paquete Económico 2024. Su aprobación y eventual ejecución elevaría el riesgo de recortes a la calificación crediticia de México, explicaron previamente analistas.
La debilidad del peso se dio tras conocerse que la Comisión de Cambios decidió recortar el programa de coberturas cambiarias. “Este programa fue iniciado en 2017 y reemplazó al de subastas antes de las críticas del FMI de que el Banxico estaba erosionando las reservas internacionales”; dijo Gabriela Siller.
La decisión del Banxico de dejar sin cambios la tasa de interés (a 11.25%) le dio un respiro al peso. Para la semana terminada el 29 de septiembre, el peso registró su segunda semana de depreciación consecutiva, esta vez por 1.42 por ciento. Mientras que en el año, la divisa se ha apreciado 10.66 por ciento.
Juan Hernández, director de Vanguard para América Latina, explicó que el desempeño del tipo de cambio “principalmente responde al diferencial de tasas de interés que hay entre México y Estados Unidos”.