Lectura 5:00 min
Peso mexicano resiste frente al dólar en tercer trimestre
La moneda terminó la última semana de septiembre con una ganancia de 0.52 por ciento. Tan solo el viernes se apreció 0.38% ante su par de Estados Unidos.
La divisa mexicana fue la única que se apreció frente al dólar durante el tercer trimestre del año, al finalizar el periodo con una ligera ganancia de 0.04%, a 20.1271 unidades por billete verde, respecto al cierre de 20.1353 unidades del 30 de junio.
Otras, como el real brasileño, que durante la última semana se colocó como la segunda divisa más apreciada ante el dólar en el año, se depreció 2.67% entre julio y septiembre.
La resiliencia que ha mostrado la moneda de México, respaldada en cierta medida por la política monetaria del Banco de México (Banxico), también la llevó a tener un cierre mensual positivo, al apreciarse 0.08% en septiembre, sumando con ello dos meses consecutivos de avance frente al dólar.
El peso también terminó la semana pasada con una ventaja de 0.52 por ciento. El viernes se apreció 0.38% ante su par de Estados Unidos, muestran datos de Banxico.
Janneth Quiroz, subdirectora de Análisis en Monex Casa de Bolsa , dijo que la fortaleza del peso respecto al dólar, no solo en el trimestre sino en lo que va del año (con una apreciación de 1.85% desde enero) se explica por la relación económica entre México y Estados Unidos, así como por la política monetaria de ambos países.
Al estar la economía de México fuertemente integrada con la de Estados Unidos, el país se beneficiaría por las exportaciones (que registran un crecimiento anual acumulado de 19%), por las remesas, así como por más inversión extranjera directa y por el turismo.
Quiroz destacó que debido a que el mercado laboral en Estados Unidos está fuerte (el desempleo alcanza una tasa de 3.7%), el flujo de remesas enviadas a México se ha mantenido alto, lo que le ha dado fortaleza al peso.
“El monto acumulado de los ingresos por remesas en el periodo enero y julio de 2022 ascendió a 32,812 millones de dólares”, indican datos de Banxico.
Además, el diferencial de 600 puntos base entre la tasa de interés de Estados Unidos (de 3 a 3.25%) y México (de 9.25%) también ha favorecido a la divisa local porque ayuda a que no haya fuga de capitales.
“Los mercados están descontando que las tasas en México se van a seguir moviendo de manera paralela a lo que haga la Reserva Federal, que el diferencial que actualmente existe de 600 puntos base entre las tasas de Estados Unidos y México se va a mantener”, dijo la especialista.
“En la parte real de la economía estamos teniendo un buen ingreso de divisas estadounidenses. En la inversión de cartera, las salidas han estado bastante contenidas en comparación con los dos años anteriores, en buena medida por los aumentos en la tasa de interés de Banxico. Realmente México se ve atractivo respecto a otros países”, dijo Janneth Quiroz.
Por su parte, el dólar también se fortaleció en el tercer trimestre del año. Esto se reflejó en el desempeño del Índice Dólar, que mide al billete verde frente a seis monedas fuertes, como el euro, la libra y el yen, al subir 7.11% a 112.12 puntos.
“El temor a una recesión global ha dirigido el movimiento de los activos financieros y contribuido al fortalecimiento del dólar durante varias semanas. Además, la inestabilidad financiera provocada por el plan fiscal en el Reino Unido, las tensiones geopolíticas en torno a la guerra en Ucrania y una narrativa más restrictiva de los miembros de la Reserva Federal exacerbaron las fluctuaciones en las monedas”, dijo Alejandro Padilla, director general adjunto de Análisis Económico y Financiero en Banorte.
Entre julio y septiembre, las monedas más débiles ante la divisa de Estados Unidos fueron el peso colombiano y la libra esterlina (-11.05 y -9.09%, respectivamente). Otra monedas igualmente se depreciaron en el periodo: corona sueca (-8.29%), euro (-6.96%) y yen japonés (-6.65%).
Siguen apostando en contra
A pesar de la relativa fortaleza del peso mexicano ante el dólar, los especuladores en la Bolsa de Comercio de Chicago (CME,pos sus siglas en inglés) mantuvieron sus posiciones en contra de la divisa mexicana lo largo del tercer trimestre, alcanzando su mayor nivel desde diciembre del 2020, ante la expectativa de que el peso registre pérdidas ante su par estadounidense.
Las posiciones netas cortas finalizaron la semana del 21 al 27 de septiembre con 41,300 contratos negativos. Como referencia, en la semana del 6 al 12 de julio éstas fueron de 14,400 contratos netos cortos.
No obstante, entre el 21 al 27 de septiembre, comparado con la semana del 14 al 20, las posturas en contra del peso aumentaron 47.4 por ciento.
“Esto se debe principalmente a que varias monedas registraron mínimos históricos, como la libra y el euro que se depreció en niveles no vistos en décadas. Esto propició un sentimiento de mayor aversión al riesgo en los mercados cambiarios y por eso los especuladores ahora están apostando que el peso se deprecie”, dijo Janneth Quiroz.