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Peso vuelve a perder por baja en nota crediticia de EU

Pese a la depreciación que ha mostrado en las últimas jornadas frente al dólar, la moneda mexicana sigue siendo la segunda que más le gana este año.

El peso siguió resintiendo la reducción en la calificación soberana de Estados Unidos por parte de Fitch Ratings y por segundo día consecutivo terminó arriba de las 17 unidades por dólar, marcando, además, su cuarta jornada de depreciación.

El tipo de cambio finalizó la sesión del jueves con un retroceso de 1.50% o 25.58 centavos, para ubicarse en 17.2849 pesos por dólar respecto al cierre previo. Ello, después de que el miércoles escaló a 17.0291 unidades, reflejando una depreciación de 1%, de acuerdo con cifras del Banco de México (Banxico). En esos dos días ha bajado 2.52 por ciento.

La depreciación del jueves ha sido la más fuerte desde el 15 de marzo, cuando perdió 1.98%, días después de anunciarse la quiebra del banco regional Silicon Valley Bank, muestran datos de Investing. Además, regresó al techo de las 17 unidades por dólar tras mantenerse durante 15 sesiones consecutivas por debajo de ese nivel.

La debilidad del peso frente al dólar ha llevado a que en las pasadas cuatro jornadas se haya depreciado 3.67%, equivalente a 61.23 centavos. Pero, en lo que va del año, acumula una apreciación de 11.40 por ciento.

Aun con los recientes retrocesos, el peso sobresale como la segunda moneda más apreciada frente a la divisa estadounidense durante el 2023, solo por detrás del peso colombiano (-15.05%).

El tercer sitio es para otra moneda de América Latina, el real brasileño que gana 6.95%; le sigue el franco suizo que se aprecia 5.44%; la libra esterlina gana 4.82% y el euro 2.24 por ciento.

Por su parte, el Índice Dólar, que mide el desempeño de la divisa estadounidense frente a una canasta de seis monedas fuertes, bajó 0.12% a 102.47 unidades este jueves. Durante el año ha descendido 1.01 por ciento.

Flaquea

Jessica Roldán, economista en jefe en Casa de Bolsa Finamex, explicó que la depreciación del peso de las últimas jornadas está relacionada con el hecho de que en economías avanzadas, no solo la de Estados Unidos, sino otras como la de Japón, hay una tendencia de mantener la política monetaria “apretada” y en economías emergentes se avizora el inicio de reducciones de las tasas de interés.

“Esta divergencia en temas de política monetaria es uno de los elementos que ha causado la fortaleza del dólar y la depreciación de monedas emergentes. También hay un fenómeno de riesgo donde los inversionistas realizan cambios en sus portafolios hacia activos considerados de menor riesgo y eso afecta todo el espectro de mercados financieros a nivel global”, explicó.

Alejandro Saldaña, economista en jefe en Banco Ve por Más (BX+), consideró que la degradación a la nota soberana de Estados Unidos por parte de Fitch (de AAA a AA+) ha debilitado al peso, llevándolo por arriba de las 17 unidades.

La noticia de la degradación de la calificación crediticia de Estados Unidos en estos días va a seguir teniendo algo de impacto, pero no va a ser duradero”, comentó en conferencia.

Recordó cómo la moneda mexicana tuvo un sensible impacto cuando se anunciaron las quiebras de los bancos regionales en Estados Unidos (Silicon Valley Bank, Silvergate Bank y Signature Bank), pero luego de un par de semanas se recuperó.

Agregó que las noticias “sorpresivas” usualmente tienen un primer efecto psicológico, el cual tiende a diluirse conforme pasa el tiempo y se van asimilando en su justa medida.

Por lo que recalcó que “esta noticia no debería de cambiar estructuralmente el panorama ni para Estados Unidos ni para el peso, al final de cuentas los activos del Gobierno federal estadounidense no dejan de ser activos de refugio y de ser un país seguro”.

Jessica Roldán también explicó que otros eventos han tenido efectos en la cotización del peso, como los buenos datos de empleo en Estados Unidos que confirman la idea de que la Reserva Federal podría subir, al menos una vez más, su tasa de referencia. También la degradación de la deuda de Estados Unidos ha llevado a los inversionistas a revisar sus portafolios para recurrir a activos más seguros.

Finalmente, Alejandro Saldaña dijo que los factores que han tenido una mayor injerencia en la cotización positiva para el tipo de cambio peso-dólar son el diferencial entre las tasas de interés del Banco de México y la Reserva Federal de Estados Unidos, la estabilidad macroeconómica, la sólida posición externa y el apetito por riesgo en mercados mundiales.

Por el contrario, prosiguió, la moneda mexicana se podría depreciar “si el diferencial entre las tasas de interés del Banxico y la Fed se reduce más de lo previsto; si la estabilidad fiscal se deteriora al punto de que la calificación crediticia del Gobierno Federal sufra una degradación; si las cuentas externas se ven impactadas por menores exportaciones, captación de remesas, inversión extranjera o visitas de turistas; si el entorno económico mundial se deteriora y ello genera episodios de aversión al riesgo”.

Los especialistas coincidieron en que el peso mexicano seguirá mostrando episodios de volatilidad.

judith.santiago@eleconomista.mx

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