Toshiba presenta pérdidas récord para su año fiscal

El gigante tecnológico Toshiba señaló este jueves que para el año fiscal 2016 registró una pérdida neta récord de 965,360 millones de yenes (8,777 millones de dólares), el mayor de todos los tiempos para un fabricante japonés.

Estas pérdidas se sitúan dentro de las estimaciones ofrecidas por la compañía y son más del doble de las registradas en 2015, cuando todavía trataba de reponerse del escándalo de manipulación por el que sobrestimó sus ingresos por ventas entre 2007 y 2014.

El conglomerado japonés también reportó los resultados de sus ganancias para el período abril-junio para el año fiscal 2017, registrando una ganancia operativa del grupo de 96,690 millones de yenes, un récord para el trimestre y casi seis veces mayor que el año anterior.

La compañía de electrónica e infraestructura publicó el informe tras obtener un aprobado parcial de sus auditores y de retrasar en tres ocasiones sus resultados de dicho período, lo que puede permitir al conglomerado eludir su retirada de negociación en la Bolsa de Tokio.

La multinacional japonesa, que había aplazado la publicación de sus resultados hasta en tres ocasiones, explicó que estas pérdidas se explican fundamentalmente por el impacto negativo de 1.24 billones de yenes en Westinghouse, su filial de energía nuclear en Estados Unidos.

Los reguladores dieron como plazo hasta hoy para que la compañía presentara sus resultados del ejercicio fiscal de 2016, que finalizó el 31 de marzo, a riesgo de ser expulsada de la plaza bursátil, una eventualidad que Toshiba evitó, al menos por el momento.

Pese a las cuantiosas pérdidas netas, el conglomerado obtuvo en el ejercicio de 2016 un beneficio operativo de 270,788 millones de yenes (2,460 millones de dólares), tras las pérdidas operativas de casi el doble de 2015.

Su facturación se redujo, por su parte, 5.5% hasta los 4.87 billones de yenes (44,254 millones de dólares), sobre todo ante la desconsolidación de Westinghouse de la matriz y pese a las "elevadas ventas" de su segmento de Memorias y discos de almacenamiento, que aumentaron un ocho por ciento.

El auditor PricewaterhouseCoopers Aarata LLC ha emitido una "opinión con calificaciones" para el informe anual de ganancias de Toshiba, lo que significa que las cifras se presentan de manera global y que sólo existen problemas menores.

"Creo que nuestras ganancias se han normalizado", señaló el presidente de Toshiba, Satoshi Tsunakawa, en una conferencia de prensa en Tokio.

"Haré todos los esfuerzos posibles para ejercer el liderazgo, trabajar con nuestros empleados para revivir Toshiba, mantener su valor corporativo y llevar ese valor a un nivel superior", indicó.

Sin embargo, el auditor emitió una "opinión adversa" sobre los controles internos de Toshiba, ya que la empresa pasó por alto las pérdidas masivas relacionadas con su ahora en bancarrota unidad nuclear estadunidense.

Si la Bolsa de Tokio estima que el gobierno corporativo de Toshiba es insuficiente, la compañía podría enfrentarse a la potencial exclusión de sus acciones.

En marzo pasado, la empresa de energía nuclear Westinghouse Electric, la filial nuclear estadunidense del grupo japonés Toshiba, se declaró en quiebra para acogerse a la protección de la normativa de este país.

El auditor señaló que hay una "inexactitud significativa" y que las cifras de Toshiba "no se basan en los niveles de contabilidad corporativa generalmente aceptados", pero tuvo un efecto limitado en los resultados globales.

El director financiero de Toshiba, Masayoshi Hirata, refutó la opinión de PwC sobre las pérdidas masivas de la compañía. Toshiba y Pwc Aarata "tienen puntos de vista diferentes, pero nuestras cifras se basan en normas contables".

Toshiba, afectada por su peor crisis financiera, espera vender rápidamente su unidad de chips rentable para recaudar dinero para cubrir las enormes pérdidas derivadas de su antigua unidad nuclear estadunidense Westinghouse Electric.

erp