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¡Ante la violencia desmedida, los transportistas alzan la voz!
Esta semana ha sido una de las más duras para los choferes de transporte de carga. En un día se presentaron un asalto, un secuestro y un asesinato en la carretera de México a Querétaro. Así, estos hechos se suman a una larga lista de situaciones de riesgo que hace años han sido reportadas por los transportistas. La envestida de los criminales no ha dado tregua desde hace ya unos años, pero es un hecho que la violencia y saña con la cual los criminales opera no había tenido precedentes como en los últimos 5 años en donde la escalada de violencia que cobra la vida de los choferes de carga no es la excepción.
En 2018, la Cámara Nacional de Autotransporte de Carga (Canacar) documentó que los robos con violencia en algunas carreteras estratégicas y logísticas para el transporte de carga, estaban sufriendo robos con violencia por parte de organizaciones delictivas, entre las carreteras peligrosas, se señalaban: la México-Tuxpan, México-Querétaro, la carretera 57 en San José de Iturbide, Guanajuato, la México-Puebla, la México- Pachuca, Lagos de Moreno, Guadalajara, la de Salamanca-Querétaro, la zona de cobro la Cuchilla, la carretera federal 45D. Así desde ya algunos años, las zonas denominadas de alto riesgo en donde destacan el Circuito Exterior Mexiquense, Arcos Norte, Guanajuato-destacando la ruta Celaya a Salamanca-, y la ruta Puebla a Veracruz -señalando Cumbres de Maltrata-, han sido las rutas más afectadas por la delincuencia desde hace años, sin que hasta el momento las autoridades federales hayan tomado medidas efectivas para protegerlas y vigilarlas.
En estos tramos, se ha sumado una violencia desmedida, en la cual los choferes son secuestrados y asesinados por grupos criminales que operan a sus anchas. De acuerdo con los reportes de la Canacar en 2018 fueron asesinados 15 choferes de transporte -cifra considerada histórica para aquellos años-. Para el año 2019, la violencia contra los choferes continuó y la Cámara del Transporte dio a conocer que ese año cerraba con 16,471 casos de robo al transporte, con un aumento de 17% más de eventos violentos, es decir -2,437 denuncias más que el año anterior, en la cual, de conformidad a información de la Confederación Nacional de Transportistas Mexicanos, habían perdido la vida más de 10 choferes de transporte.
Entre 2020 y 2021, la Alianza Mexicana de Organización de Transportistas reportaba un registro de aproximadamente 30 choferes que habían sido asesinados por la delincuencia organizada en los estados de Veracruz, Puebla, Hidalgo, Tlaxcala y el Estado de México. Así, para el 2022 se registraban oficialmente 15 asesinatos más. Para 2022 la Federación Mexicoamericana de Auto transportistas (Fematrac) reportaba que, en cuatro años, se habían reportado más de 100 choferes asesinados. En esos años, las tareas de vigilancia de las carreteras pasaron a ser una de las 43 funciones de la Guardia Nacional, después de desaparecida la Policía Federal.
Así entre severas pérdidas económicas y materiales provocadas por extorsiones, robos y asesinatos de choferes, la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin) dio a conocer que la violencia desmedida en las carreteras, ha traído pérdidas a los transportistas en 2022 de aproximadamente 7 mil millones de pesos, con un cálculo estimado de 46 robos al transporte de carga diariamente, sin que las autoridades federales ni la Guardia Nacional hayan hecho intervenciones o bridando un verdadero apoyo para contender la delincuencia que ahora califican de desbordada en las rutas que son estratégicas para la industria. Es así como el próximo 5 de febrero habrá un paro nacional de transportistas en la carretera México- Querétaro, reclamando el hartazgo y la inoperancia de las autoridades para garantizar la seguridad de la vida como de su patrimonio… ¿De verdad podemos celebrar honestamente que vamos bien en materia de seguridad? ¿De verdad las instituciones de seguridad pueden sostener mejoras con estos hechos…?