Buscar
Opinión

Lectura 3:00 min

El extraño caso de Dr. AMLO y Mr. Peje

Este es el primer autogol de la campaña 2018 y si no lo arregla pronto, puede convertirse en una bola de nieve...

Si alguien puede derrotar a Andrés Manuel López Obrador es El Peje, esa especie de otro yo autoritario, intolerante e imprudente que vive dentro del propio Andrés. Lo traicionó en el 2006, cuando lo llevó a cometer errores que le costaron la elección, pifias que AMLO nunca reconoció públicamente pero que quedaron en la historia y en su propia memoria. A él le gusta mucho más, por supuesto, hablar de “las puercadas de la mafia en el poder”, pero todas esas maniobras, legales y no tanto, que sí hicieron los que buscaron derrotarlo, dieron resultado gracias a los errores de López Obrador.

Toda la precampaña el Dr. AMLO ha estado sonriente y feliz, contestando con buen humor a los ataques que, por lo demás, son más predecibles que una luna llena, pero de repente apareció Mr. Peje para traicionar a Andrés Manuel. Mr. Peje decidió pelearse a lo tonto con los columnistas serios de este país. No con aquellos que se les ven las cuerdas del titiritero, que no son pocos, sino con los que son reconocidos como independientes y críticos. Eso no lo soportó, quizá porque frente a los señalamientos que le hicieron simplemente Andrés no tiene argumentos.

López Obrador está haciendo todo lo necesario para ganar y eso incluye traicionar su propio discurso admitiendo toda clase de sátrapas en sus filas. Le dolió en el alma que Jesús Silva Herzog Márquez le llamara oportunista, pero lo que está haciendo no tiene otro nombre. Es cierto, no es distinto de lo que hacen otros partidos, pero justamente por eso es relevante: no puedes ir por la vida predicando que eres distinto y al final hacer lo mismo.

Los señalamientos sobre el entorno familiar que hizo Raymundo Riva Palacio también hicieron brincar a Mr. Peje. Andrés Manuel se había caracterizado y diferenciado del resto de los políticos por lo discreto de su vida privada. Por supuesto que tiene derecho a involucrar a quien quiera en su campaña, incluidos los hijos, pero eso tiene un costo. Hay que dejar muy claro que no es que el periodista se haya metido con los hijos de López Obrador, es él quien subió a los hijos a la vitrina. Los orgullos de su nepotismo serán, porque tienen que ser, escrutados.

¿Afectará el pleito las preferencias electorales? En el corto plazo no. Es, ciertamente, un tema de círculo rojo. Pero este es el primer autogol de la campaña 2018 y si no lo arregla pronto, el error, que hoy parece menor, puede convertirse en una bola de nieve.

El fantasma del 2006 está ahí, como una referencia del extraño caso de Dr. AMLO y Mr. Peje.

Únete infórmate descubre

Suscríbete a nuestros
Newsletters

Ve a nuestros Newslettersregístrate aquí

Últimas noticias

Noticias Recomendadas

Suscríbete