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Financiamiento a la agricultura protegida en Sinaloa
La entidad sembró en el 2021 (dato más reciente), una superficie total de 991,084 hectáreas en los diferentes cultivos, de las cuales 9,324 fueron destinadas a cultivo de hortalizas bajo la modalidad de agricultura protegida
Uno de los problemas ambientales más relevantes en la actualidad es el cambio climático, el cual puede representar un gran impacto en el sector agrícola de México, pudiendo afectar la rentabilidad de los proyectos agrícolas por los efectos negativos como escasez de agua, mayor presencia de plagas y enfermedades, proliferación de malezas y eventos meteorológicos extremos, entre otros. La consecuencia de los mismos provoca variación en la oferta de productos agrícolas que impactan en los precios para los consumidores finales.
Lo anterior representa una preocupación en el tema de seguridad agroalimentaria, social y económica, principalmente en la población del medio rural.
La agricultura protegida permite que los productores puedan controlar algunos factores del medio ambiente, disminuyendo el impacto de los mismos sobre los cultivos.
En esta modalidad, las estructuras más utilizadas en México son los invernaderos, malla sombra y macro y micro túneles, así como tecnologías complementarias para el uso eficiente del agua y energía; la decisión de qué tecnología utilizar depende de cada zona productora, el cultivo a producir y los recursos económicos disponibles, además de los requerimientos del mercado nacional y de exportación.
De acuerdo al Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP), en México durante 2021 (último dato) el total de superficie sembrada en los diferentes cultivos fue de 18 millones 11,864 hectáreas.
La Asociación Mexicana de Horticultura Protegida (AMHPAC) detalló que en 2021 México registró 47,795 hectáreas en agricultura protegida, que representa un 0.3% de la superficie a nivel nacional.
Sinaloa sembró una superficie total de 991,084 hectáreas en los diferentes cultivos, de las cuales 9,324 hectáreas fueron destinada a cultivo de hortalizas bajo agricultura protegida que representa un 0.9% de la superficie estatal.
Sin embargo, el cultivo de hortalizas es el más susceptible de adoptar un sistema de agricultura protegida sostenible, debido a que se encuentran encaminadas en cuidar y proteger el ambiente con base en el cumplimiento de normas y certificaciones que solicita el mercado de exportación, principalmente Estados Unidos y Canadá, el cual incentiva la adopción de prácticas de producción sustentables, con enfoque de protección ambiental y social.
En el último año se establecieron 27,997 hectáreas de hortalizas, de las cuales 9,324 hectáreas fue bajo un sistema de agricultura protegida sostenible, que representa un 33% de la superficie cultivada de hortalizas en el estado.
Además, Sinaloa tiene la mayor superficie a nivel nacional con esta tecnología, misma que representa alrededor de 20% del total, y se utiliza principalmente en los cultivos de jitomate, pepino y chile.
Con la finalidad de aumentar la producción de alimentos de manera sostenible y de mejorar la seguridad alimentaria, los Fideicomisos Instituidos en Relación con la Agricultura (FIRA) en Sinaloa, fomenta proyectos sostenibles que se desarrollan en el medio rural, benefician al medio ambiente y mejoran la capacidad de mitigación y adaptación al cambio climático de los cultivos, además de inducir la equidad social y económica; lo anterior mediante el acceso al crédito para estos proyectos atendiendo los objetivos prioritarios de FIRA, como son: inclusión Financiera, productividad y eficiencia y sostenibilidad.
En los últimos años se ha inducido el financiamiento a inversiones en infraestructura de agricultura protegida, como lo son invernaderos, mallas sombras y sistemas de riego tecnificado, así como capital de trabajo requerido para la producción de hortalizas.
Durante el 2021 participaron en Sinaloa 16 intermediarios financieros con el financiamiento en estos conceptos por 531 millones de pesos, mientras que de enero a noviembre del 2022 se canalizaron 811 millones de pesos, lo que representaría un crecimiento en este programa de alrededor del 53% respecto al año previo, estimándose alcanzar los 1,000 millones al cierre de 2022. El 75% de las inversiones se realizan en la zona centro del estado.
*Julio César de la Cruz Zavaleta y Nereo Méndez Cruz, son agente y promotor de FIRA. La opinión es de los autores y no coincide necesariamente con el punto de vista oficial de FIRA.
