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Fiscalización, simplificación e impuesto rosa
El Paquete Económico 2022, en la parte fiscal, no traerá nuevos ni mayores impuestos.
Así lo prometió el presidente Andrés Manuel López Obrador y así lo cumplirá el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O.
Sin embargo, sí tendrá como objetivo, aumentar la recaudación fiscal. El peso de la misión casi imposible recaerá en la Jefa del Servicio de Administración Tributaria (SAT), Raquel Buenrostro, quién se ha ganado a pulso el mote de “La Fiscal de Hierro” porque ha logrado meter en cintura a grandes y poderosos contribuyentes que venían haciéndose patos en el pago completo de sus contribuciones.
Hay que recordar que en el 2020, el año de la pandemia y el confinamiento obligatorio, el SAT elevó la recaudación tributaria a un monto de 3 billones 338.9 mil millones de pesos.
Esa cifra representó un aumento nominal de 137,000 millones y un crecimiento real de 0.8% respecto a lo recaudado en 2019.
Por eso, es factible que el SAT logre superar el reto de volver a aumentar la recaudación.
Lo que viene
Con mano firme Buenrostro intensificará la fiscalización entre los grandes contribuyentes, acotará la evasión fiscal con los parámetros en las tasas efectivas de impuestos y emprenderá una campaña para que paguen impuestos los grandes comercializadores de la economía informal.
No va por el último eslabón de la cadena de la informalidad, sino por los grandes capitales que mueven al 50% de la economía.
Y que en el otro 50% de la economía, es decir el de la economía formal, paguen bien los grandes contribuyentes, y paguen justamente los medianos.
En el mejor de los escenarios el SAT podrá recaudar alrededor de 2 billones de pesos adicionales a lo que se recauda hasta ahora.
Y en el peor de los casos recaudará 1 billón de pesos.
Facilidades e incentivos
Y si no vienen nuevos ni mayores impuestos, ¿qué novedades contendrá el Paquete Económico 2021 que incluye la Ley de Ingresos, el Presupuesto de Egresos de la Federación y los Criterios Generales de Política Económica?La noticia es que contendrá un régimen simplificado para personas físicas y morales.
Y la novedad es que incluye un “impuesto rosa” que implica tasa cero en el Impuesto al Valor Agregado para el consumo femenino en productos higiénicos.Viene una campaña que busca simplificar lo más que se pueda el pago de impuestos.
El régimen simplificado para personas físicas se enfocará en aquellas que tienen ingresos inferiores a los 3.5 millones de pesos anuales.
Y para el caso de las personas morales se orienta a aquellas que tienen ingresos menores a los 35 millones de pesos.
Eliminar cultura del no pago
Dice Buenrostro que la intención es eliminar la cultura del no pago.
Con el cobro que se ha realizado a los grandes contribuyentes, ha comenzado a permear la nueva cultura.
El año pasado, como consecuencia de la ejemplaridad que se logró, aumentó en 15% el pago de impuestos entre las personas físicas.
Y entre las personas morales aumentó el número de declaraciones presentadas en 40,000.
Eso le da la percepción al SAT de que está permeando el concepto de justicia fiscal.
Lupa al transporte
Para atacar la informalidad, la estrategia se enfocará en los grandes comercializadores que están detrás de esta gran parte de la economía.
Y para llegar a ella pondrá la lupa sobre los transportistas.
¿Por qué?, porque las mercancías ilícitas en las que se fundamenta la informalidad, entran de contrabando por las aduanas, o son robadas y, en los dos casos, tienen que ser transportadas a los puntos finales de distribución.
De ahí la decisión de poner en vigor en México la Carta Porte que ya se aplica en otros países. Se busca tener un mayor control sobre el transporte.
Se estima que el 60% del transporte es informal.
En suma viene mayor fiscalización, campaña de simplificación, impuesto rosa y campaña para cobrar impuestos a los informales. A ver.