Lectura 4:00 min
Juez niega amparo a Google contra investigación del IFT
Ilustración EE: Nayelly Tenorio
Google perdió un round judicial contra el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) en la investigación que esta autoridad realiza en el mercado de sistemas operativos móviles, dominado por Android de Google y iOS de Apple. El IFT, erigido en autoridad de competencia, tiene elementos para suponer “que no existen condiciones de competencia efectiva” en el negocio del software que hace funcionar los teléfonos móviles, lo que repercute negativamente en los consumidores y en los competidores.
El juez Ramón Lozano Bernal, titular del Juzgado Tercero de Distrito Especializado en Competencia Económica, Radiodifusión y Telecomunicaciones, desechó “de plano” la demanda de Google con expediente 168/2023 por “notoriamente improcedente”, lo que obligó a la compañía a presentar una queja en una segunda instancia, un tribunal colegiado especializado. El acuerdo del juez Lozano se anunció el 24 de abril de 2023; Google se quejó el 8 de mayo.
Es probable que el tribunal colegiado ratifique la decisión del juez, sobre todo si se trata de una queja de Google de una actuación intraprocesal y no de una resolución final de autoridad, como exige el artículo 28 de la Constitución.
Google está inconforme con la segunda parte del proceso de investigación del IFT. La primera parte terminó en enero de 2023 con un dictamen preliminar de la Autoridad Investigadora del IFT, dirigida por la abogada Paulina Martínez Youn, que determinó un “grupo de interés económico” en el mercado de los sistemas operativos móviles y propuso “medidas para eliminar potenciales efectos anticompetitivos”.
El grupo de interés económico refiere a una serie de empresas vinculadas pero no constituidas como una entidad única que influye en el mercado, ejerce una posición dominante o simula competencia.
El dictamen preliminar de la Autoridad Investigadora fue avalado por unanimidad por los 4 comisionados del IFT en la sesión del pleno del 15 de febrero de 2023 (Acuerdo P/IFT/150223/46).
El proceso vive ahora su segunda etapa en lo que se conoce como “procedimiento seguido en forma de juicio”, que fue asignado a la Dirección General de Procedimientos de Competencia, que encabeza la abogada Claudia Araceli Lelo de Larrea Mancera, para imponer medidas en consecuencia y en beneficio de la competencia y los consumidores.
La investigación del IFT lleva el número de expediente AI/DC-001-2020. Se anunció en octubre de 2020 pero se inició en agosto de 2021, luego de que el Primer Tribunal Colegiado en Materia Administrativa Especializado en Competencia Económica, Radiodifusión y Telecomunicaciones resolviera un conflicto administrativo entre la Cofece (Comisión Federal de Competencia Económica) y el IFT sobre las competencias de cada autoridad en la regulación de los diferentes mercados relacionados con la economía digital y las telecomunicaciones.
En su decisión de junio de 2021, el Primer Tribunal Colegiado determinó que la Cofece es la autoridad responsable de regular los mercados de servicios de búsqueda en línea, de redes sociales y de servicios de cómputo en la nube. Al Instituto Federal de Telecomunicaciones le corresponde vigilar el mercado de los sistemas operativos móviles, en el que se incluye el mercado de las tiendas de aplicaciones.
La investigación se inició por la presunción de que “no existen condiciones de competencia efectiva” en el mercado del software operativo de los teléfonos móviles y otros equipos de cómputo, como televisores o sistemas de entretenimiento en automóviles. Muy probablemente esta investigación sobre los sistemas operativos móviles generó los insumos para las dos investigaciones posteriores por presuntas prácticas monopólicas relativas en el mercado de tiendas de aplicaciones, como la Play Store de Google (Android) y la App Store de Apple (iOS).
No será fácil para el IFT demostrar que Google o Apple o cualquier otro proveedor (¿existen otros?) contribuyen a generar “barreras a la competencia” y “efectos anticompetitivos” en el segmento. ¿Pero quién dijo que una investigación de competencia es sencilla, sobre todo cuando se investiga a dos de las compañías más grandes y poderosas del planeta, como Google y Apple?
Presenciamos una derrota de Google en una larga carrera de obstáculos para todas las partes que no terminará pronto.
