Buscar
Opinión

Lectura 5:00 min

“Now And Then” o la eterna fascinación de la nostalgia pop

El lanzamiento de “Now And Then” ha sido magnificado como “la última canción de The Beatles” o que “la inteligencia artificial ha reunido a The Beatles”. La prensa musical ha sido, desde su invención, el brazo de una industria cuya única razón de ser es vender más discos y mantenernos enganchados. Esta industria se consolidó ayudando a crear mitologías. Cuentos bonitos que buscamos construir sobre los artistas que escuchamos. La mitología de la música pop consiste en crear fantasías sobre la creación de nuestras canciones y nuestros discos favoritos con los que hemos crecido. 

“Todo lo que se ha escrito sobre técnicas en el estudio y el acervo popular sobre los estudios de grabación y todas las cosas que han pasado en discos famosos, todas esas cosas en la cultura popular que la gente ha escuchado sobre lo que ocurrió en un estudio no pasó”, recordó el ingeniero y productor Steve Albini, durante una reciente entrevista en el podcast de Conan O’Brien a propósito del relanzamiento del In Utero de Nirvana.

La música, se dice, es algo que nos ayuda a construir nuestra identidad como personas. Durante la adolescencia, es el elemento que nos ayuda a distinguirnos de los demás. Nos hace sentir especiales y diferentes del mundo y de nuestras familias o que nos acerca a nuestros pares.

En la construcción mitológica, la historia de The Beatles se ha convertido en una biblia para reconstruir una imagen divina sobre cuatro músicos que sólo empezaron a hacerlo porque no querían estudiar, trabajar en una fábrica ni tener empleo convencional, como sus padres. Ellos querían conocer mujeres y pasarla bien. The Beatles, se dice, cambió el rumbo de la música popular. Transformaron las técnicas en el estudio de grabación y pasaron de hacer canciones tontas de 2 minutos a composiciones épicas que transmitían el mensaje de una nueva generación. Inventaron los conciertos de estadio, el fanatismo que sigue llevando a los fanáticos a romper en la histeria cuando los van a ver a los conciertos, como las Swifties, los K-Poppers o todas las boybands que subsecuentemente se han producido en la historia reciente. En esta mitología seguimos queriendo revivir y reunir a los Beatles después de su separación en 1970. Una revolución en un breve lapso de 8 años.

En la versión mitológica, “Now And Then” es una canción que tardó cuatro décadas en hacerse. Lo que comenzó con un demo de John Lennon grabado en el edificio Dakota fue retomado por Paul McCartney, George Harrison y Ringo Starr en los noventa durante las sesiones de las canciones que serían incluidas en las Antologías. Existen señales de que Harrison nunca estuvo convencido con el resultado y McCartney concedió en el más reciente minidocumental —que acompaña el lanzamiento de “Now And Then”— que se les acabaron las ideas en el estudio. 

Alimentando la narrativa sobre la constante experimentación tecnológica que acompañó siempre a los Beatles, está el uso de la inteligencia artificial para separar la voz de Lennon de un rudimentario casete con ayuda del software MAL Audio Technology, desarrollado por la casa productora WingNut del director Peter Jackson. Con  machine learning, MAL Audio Technology puede distinguir y separar todos los elementos de una grabación. 

“Now And Then” cierra una historia de 60 años que comenzó cuando el 2 de noviembre de 1962 lanzaron en el Reino Unido “Love Me Do”. El sencillo “Now And Then”, que se lanza este viernes, incluye estas dos canciones para de forma simbólica cerrar el ciclo que ha sido perfectamente construido en esta historia. 

El fanático irredento dentro de mí estuvo los días previos al lanzamiento de esta canción con la misma emoción adolescente a la espera del nuevo disco de mi artista favorito. Consumiendo cada fragmento de información disponible, listo para crear esa narrativa extraordinaria sobre lo que se ha vendido como “la última canción de The Beatles”. Y esta navidad habrá nuevas reediciones de las compilaciones conocidas como el álbum Azul y Rojo para acompañar esta nostalgia Beatle sobre la que seguimos viviendo y sin olvidar la  gira más reciente de Paul McCartney que pasará por México en unas semanas.

Hacer un valor crítico sobre “Now And Then” es un poco irrelevante, como lo ha sido en toda la crítica pop: la música nos gusta porque nos dice algo en un momento particular de nuestras vidas. La música nos une, nos acerca a las personas que más queremos y nos mantiene cerca de los que ya no están. La última canción de The Beatles es un recordatorio de que ya no están ni John Lennon ni George Harrison y que nada podrá reconstruir la magia de aquellos cuatro músicos en el estudio. 

Pero seis décadas después de que The Beatles irrumpió en este planeta con los tres acordes de “Love Me Do”, seguimos hablando de The Beatles, escuchando la música de ellos que son como nuestros amigos. Así como en 1967 cantaban que todo lo que necesitamos es amor mientras la televisión se saturaba con imágenes de la guerra, la destrucción y la tragedia, en 2023, John, Paul, George y Ringo nos siguen dando un momento de armonía para cantar y escaparnos por un momento en medio de la locura y la tragedia de este complicado mundo. 

Y por eso nos gusta esto que llamamos música pop.   

antonio.becerril@eleconomista.mx 

Temas relacionados

Coordinador de Operaciones Online. Periodista. Desde el 2019 escribe la columna semanal sobre música “Mixtape” en El Economista. Ha sido reportero de tecnología y negocios, startups, cultura pop, y coeditor del suplemento de The Washington Post y RIPE.

Únete infórmate descubre

Suscríbete a nuestros
Newsletters

Ve a nuestros Newslettersregístrate aquí

Noticias Recomendadas

Suscríbete