Tercer debate presidencial ni mucho ni poco

El tercer debate fue uno más, las limitaciones del formato y de los candidatos hicieron un debate sin color y poco atractivo para los ciudadanos...

Con candidatos descafeinados y previsibles se llevó a cabo el tercer debate presidencial, Claudia Sheinbaum, Xóchitl Gálvez y Máynez fueron planitos y faltos de ideas y propuestas.

La monotonía del debate no impactará en las tendencias electorales.

Si bien Xóchitl Gálvez se vio con mayor soltura, no tuvo una estrategia sistemática que pusiera en aprietos a la candidata de Morena. El golpeteo de Xóchitl fue fuerte, pero sin la suficiente convicción para destroncar la estrategia morenista.

En el otro lado, la candidata de Morena se vio evasiva, y con el tono machacón de los resultados del gobierno de Andrés Manuel López Obrador y los suyos propios en la Ciudad de México logró esquivar los ataques.

Por ejemplo, en materia de salud la candidata de Morena habla de los éxitos del sistema de salud como si estuviéramos verdaderamente en Dinamarca.

El muñeco Jorge Máynez, patiño de Dante Delgado y de la grey morenista se dedicó a atacar a la candidata Xóchitl Gálvez.

El candidato de Movimiento Ciudadano sin ideas claras se dedicó a repetir el discurso de Andrés Manuel López Obrador para descalificar el PRIAN.

A estas alturas, los servicios de Dante Delgado resultan muy caros, ni a Morena le hacen falta sus votos, ni a Xóchitl Gálvez le alcanzaría si MC se suma a su causa. La estrategia de Dante Delgado se pasó de tueste y terminó quedándose solo.

En la parte relativa a la reforma al Poder Judicial basta sólo apuntar lo limitado de los candidatos presidenciales, vale la pena apuntar que la Suprema Corte de Justicia tiene bajo sus funciones el control constitucional y que dicho control no tiene matices. La SCJN no se excede, simplemente ejerce sus facultades. Y decirle a la Dra. Sheinbaum que el control constitucional nunca será malo y que nunca será ni mucho ni poco, solo es control y es necesario.

También señalar a los candidatos que el estado de derecho, la certeza y seguridad jurídica son la base del sistema judicial mexicano y el garante del sistema político y la democracia mexicana, que asegura la transición pacífica de poderes.

Querido lector, el tercer debate fue uno más, las limitaciones del formato y de los candidatos hicieron un debate sin color y poco atractivo para los ciudadanos. Hasta la próxima.