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Todo depende del color del cristal con que se mira
La frase completa del poema de Campoamor es: “En este mundo traidor nada es verdad ni es mentira, todo es según el color del cristal con que se mira”.
La frase viene a cuento ya que el país está dividido como hace muchos años no lo estaba. Esta división es más profunda que la lucha política que se da normalmente entre los partidos y tiene que ver con la forma en que los diversos grupos sociales perciben los resultados del gobierno y el futuro del país.
En opinión de un 40% de la población el gobierno de López Obrador ha sido nefasto y el peor del que se tenga memoria; niegan cualquier avance y aunque en realidad no han sido afectados, se sienten agredidos por el discurso de descalificación del presidente y amenazados con el riesgo de una polarización social que les afecte.
Les preocupa el rumbo del país, son seguidores de las cifras macro de la economía y la seguridad y no entienden y descalifican al 60% de la gente que lo sigue apoyando.
Está por otro lado ese 60% que ve las cosas con un color diferente y desde otra perspectiva. La gran mayoría son familias de escasos recursos, bajo nivel educativo y dependen mucho de los apoyos del gobierno. Para ellos López Obrador ha sido su salvación en medio de la pandemia, la crisis económica y la inflación.
Sus programas sociales han sido, y son en muchos casos, el sostén principal de la familia; reciben la pensión para los abuelos, la beca para los hijos y en ocasiones el apoyo a algún miembro con una discapacidad o una hija que es madre soltera. Se han beneficiado del aumento al salario mínimo y de programas como fertilizantes gratuitos o sembrando vida. Piensan que el gobierno está apoyando la educación y la salud por la remodelación de escuelas y hospitales en sus comunidades.
Saben que la economía va mal, pero a ellos nunca les han beneficiado las reformas estructurales, la estabilidad, el crecimiento económico o las reformas políticas de los últimos años. Normalmente trabajan en la economía informal y nunca han sido beneficiarios del Seguro Social o del Seguro Popular.
Para ellos la presencia del Ejército es sinónimo de más seguridad y agradecen al gobierno la creación de la Guardia Nacional y sienten que están más protegidos con los programas sociales y la remesas. Estuvieron de acuerdo con la cancelación del aeropuerto de Texcoco y la cervecería, con la construcción de la refinería y el Tren Maya, con la Revocación de Mandato y la reforma del INE y del Congreso.
El presidente y Morena les han hecho creer que los programas sociales van a desaparecer y la única información que reciben es del gobierno y de los servidores de la Nación.
Si la oposición no entiende que el cristal con que mira la gente pobre a López Obrador y su gobierno es muy diferente a como lo miran las clases medias y altas o los empresarios, y mientras no haga propuestas directas que beneficien a esas mayorías, las posibilidades de derrotar a Morena no existen.