Buscar
Opinión

Lectura 3:00 min

Verástegui impulsa el trumpismo y ultraderechismo en México

El próximo sábado, bajo el lema “Dios, patria y familia”, la Conferencia Política de Acción Conservadora, versión mexicana de la ultraderechista Conservative Political Action Conference (CPAC) de Estados Unidos, celebrará su segunda reunión en la Ciudad de México.

Pero ¿qué es CPAC? Fundada en 1974 para promover la agenda conservadora de Estados Unidos y apoyar a políticos republicanos afines, CPAC viró hacia la extrema derecha desde que Donald Trump asumió la presidencia en 2017. Desde entonces, ha dado mayor protagonismo a oradores y movimientos vinculados al nacionalismo blanco y cristiano, como la congresista conspirativa Marjorie Taylor Greene, el exasesor de Trump, Steve Bannon, actualmente preso por desacato, y Nick Fuentes, comentarista político supremacista, antisemita, misógino y homófobo. Estos y otros similares utilizan CPAC para promover ideologías nacionalistas y teorías conspirativas racistas, como la teoría del Gran Reemplazo, que sostiene que grupos judíos y afroamericanos buscan desplazar a los blancos como mayoría en EU.

La expansión internacional de CPAC, iniciada en 2017, difunde su mensaje conservador en Japón, Australia, Brasil, Hungría y México.

En México, CPAC ha sido organizada por Eduardo Verástegui, actor y activista político reconocido por sus posturas ultraconservadoras. Este año, reunirá a figuras prominentes de la derecha internacional, entre ellos el presidente argentino Javier Milei, el diputado brasileño Eduardo Bolsonaro y el político chileno José Antonio Kast, defensor del régimen de Pinochet. Estos oradores representan diversas posturas conservadoras y de ultraderecha, enfocadas en valores tradicionales y políticas anti-género. La inclusión de grupos como México Republicano y Creemos, conocidos por sus posiciones radicales, refleja la apertura de CPAC a ideologías extremistas.

El ascenso de Verástegui como figura central en el movimiento conservador en México ha sido facilitado por su conexión con líderes internacionales de derecha, especialmente Trump, y su participación en eventos de CPAC en EU. Su objetivo declarado es fundar en 2025 un partido político similar al Partido Republicano de Trump, promoviendo una agenda político-religiosa que combina neoliberalismo, nacionalismo y catolicismo, lo que podría fragmentar el espectro conservador actualmente representado por el PAN.

La adopción del trumpismo por parte de Verástegui y otros participantes en CPAC México fomenta la difusión de una agenda nativista y nacionalista cristiana en el país, lo que probablemente intensifique la polarización política. La presencia de figuras internacionales con discursos clasistas y racistas podría legitimar y profundizar las divisiones sociales, erosionando la ya frágil democracia mexicana, promoviendo un nacionalismo extremo y desviando el debate público hacia temas polarizadores.

Como en EU, CPAC busca redefinir el panorama político y reconfigurar la confrontación social. Al hacerlo posiblemente exacerbará las tensiones políticas y sociales, lo que podría poner en riesgo la estabilidad del país. Su influencia podría desencadenar un ciclo de mayor polarización y conflicto que debilite aún más la democracia de nuestro país.

Facebook: Eduardo J Ruiz-Healy

Instagram: ruizhealy

Opinador, columnista, conferencista, media trainer, 35 años de experiencia en medios de comunicación, microempresario.

Únete infórmate descubre

Suscríbete a nuestros
Newsletters

Ve a nuestros Newslettersregístrate aquí

Últimas noticias

Noticias Recomendadas

Suscríbete