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AMLO, empleo: saldo negativo
El saldo en materia de empleo del sexenio lopezobradorista es negativo.
En la primera administración de la autodenominada Cuarta Transformación, disminuyó notablemente la creación de empleos formales. Y en paralelo, aumentó el empleo informal.
El obradorato fracasó en su estrategia para impulsar el crecimiento económico.
La economía mexicana en el sexenio pasado, a reserva de que se consolide la información y se difunda en las próximas semanas, habrá registrado un crecimiento inferior al 1 por ciento.
Será la menor tasa de crecimiento económico en los últimos 36 años.
En ese contexto, resultaba difícil, que se lograra una mayor tasa de empleo formal.
Y es lógico que la tendencia histórica que marca un mayor crecimiento del empleo informal, se haya mantenido.
No son elucubraciones. Son datos oficiales.
El Instituto Mexicano del Seguro Social dio a conocer las cifras del empleo formal en México al cierre del 2024.
Los datos del año recién terminado reportan la creación de 213,993 empleos.
Esa cantidad es 67% menor respecto al año previo.
Fue el nivel más bajo para un año sin crisis económica o sanitaria.
Para tener una mejor perspectiva de lo que implica el reducido número de empleos creados en 2024, hay que recordar que se deben de crear un millón de empleos anuales.
Es decir, para dar oportunidad de empleo a la población que se incorpora a la Población Económicamente Activa cada año, se requiere generar un millón de empleos
De acuerdo con la compilación de datos que hizo el economista Carlos Ramírez, socio de la consultoría Integralia, el empleo formal registró una fuerte caída del 2019 al 2024, respecto del 2013-2018.
El empleo formal en México, pasó de 4.017 a 2.159 millones.
Tan solo en el mes de diciembre del 2024 se habrían perdido 405,259 posiciones.
El comunicado del Instituto Mexicano del Seguro Social lo informó así:
Al 31 de diciembre de 2024, se tienen registrados ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) 22,238,379 (veintidós millones doscientos treinta y ocho mil trescientos setenta y nueve) puestos de trabajo, de los cuales el 87.0% son permanentes y el 13.0% son eventuales.
Con esta cifra –continúa el boletín oficial–, en diciembre la variación mensual es de -405,259 puestos, que equivale a una tasa mensual de -1.8 por ciento.
En los últimos doce meses se observa un crecimiento de 213,993 puestos de trabajo, que representan una tasa anual de 1.0 por ciento.
Esa es la versión oficial.
De acuerdo con la reunión de datos de Ramírez, del 2019 al 2024 se habrían perdido 1.858 puestos de trabajo, respecto de los registrados al cierre del sexenio previo del 2013 al 2018, que cerró con poco más de 4 millones de empleos.
Por otra parte, según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), 32.8 millones de personas trabajan en alguna de las vertientes de la informalidad en el país en la actualidad.
La informalidad laboral tuvo un repunte hacia el final del 2024 y se ubicó en su nivel más alto en los últimos 12 meses; en un año se incorporó a esta modalidad de empleo un millón de personas.
En pocas palabras: el empleo formal decreció y el empleo informal aumentó.
El empleo es uno de los indicadores que mejor refleja el comportamiento de una economía
La generación de empleos, la calidad del empleo y el nivel de empleo formal e informal están determinados por la dinámica del mercado laboral.
Los gobiernos no son los principales generadores de empleo. Es la iniciativa privada la principal fuente de creación de puestos de trabajo.
Sin embargo, son los gobiernos, los que procuran o no las condiciones para que se realice un mayor nivel de inversión y ésta es la que marca el ritmo en la tasa de crecimiento económico y empleo.
En el sexenio pasado no se alentó la inversión privada y ello, al final, se refleja en el bajo nivel de crecimiento y ocupación en el país.
El gobierno de Claudia Sheinbaum inició con finanzas públicas muy comprometidas y con una narrativa muy parecida a la de su predecesor, en materia económica. Aunque con mucha atención se pueden observar algunos indicios de una paulatina apertura al sector privado en distintos sectores, todo apunta a que se hará bajo la condición de que el gobierno tenga prioridad.
Vienen tiempos difíciles con los principales socios comerciales del país y más valdría, que el gobierno mexicano tome sus precauciones para impulsar con los motores internos a la economía nacional.
Veremos.
Atisbos
Prudential Seguros México anunció el nombramiento de Sofía Belmar como su nueva Chief Executive Officer (CEO) a partir del 15 de enero de 2025.
Belmar ha ocupado posiciones clave en la industria. Recientemente, se desempeñó como vicepresidenta senior de Desarrollo de Negocios para América Latina en MetLife. Previamente, como directora general de MetLife México, estuvo al frente de una de las operaciones de seguros de vida más grandes del país, donde impulsó avances significativos en crecimiento e innovación durante seis años.
Sofía fue la primera mujer en presidir la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS).