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Cambio de rumbo
Esta semana habrá que estar pendientes del dato de inflación en Estados Unidos para octubre, y a la decisión de política monetaria de Banco de México, en la que se espera un recorte de un cuarto de punto a pesar de haberse incrementado la inflación en octubre, al ubicarse en 4.76% la general, y la subyacente quedar en niveles de 3.80 por ciento.
Sin lugar a dudas, la semana pasada estuvo llena de eventos, tanto a nivel local como internacional, que nos dejan claro que ha habido un cambio de rumbo en política, economía y quizá el destino de los países, incluido el nuestro. Empecemos por decir que el martes hubieron dos eventos clave para el rumbo de nuestro país.
Por un lado se confirmó el triunfo de la reforma al Poder Judicial, lo que sin duda, y de acuerdo a juristas expertos, no implica solamente modificaciones a nuestra Constitución, sino que se pierde el espíritu original de la misma, la cual consideraba la división de poderes y su independencia, y los pesos y contrapesos que dan certeza jurídica tanto a inversionistas nacionales como extranjeros, por decir lo menos.
Por otro lado, se llevaron a cabo las elecciones presidenciales en el vecino país del norte, donde las encuestas le daban una pequeña ventaja a la candidata del Partido Demócrata, Kamala Harris, mientras las casas de apuestas le apostaban al candidato republicano, Donald Trump.
Este último, una vez más, uso diversos slogans para promover su campaña que no resultaban favorables para nuestro país, como los que declaró en contra de la migración ilegal y anunció que de llegar a ser presidente habría una deportación masiva de migrantes indocumentados y que continuaría con la construcción del muro fronterizo.
Habló también del combate a los carteles mexicanos que han inundado de fentanilo a su país. Asimismo, propuso medidas proteccionistas como la aplicación de aranceles, especialmente para productos chinos, pero también como estrategia de presión para resolver los temas de migración y narcotráfico provenientes de nuestro país, lo cual podría afectar de manera importante el comercio entre ambos países.
También en su campaña Trump habló de reducción de impuestos y regulaciones, lo que podría implicar un cambio de rumbo en el manejo de la economía de los Estados Unidos para entrar de nueva cuenta a una fase expansiva, generándose de nueva cuenta presiones inflacionarias.
Al final Trump ganó la presidencia con al menos 295 votos electorales, mientras que Kamala Harris quedó con 226. Trump también se llevó la mayoría en el Senado, al quedar con 53 de los 100 escaños, y todo apunta a que también serán mayor el número de republicanos en la Cámara de Representantes; es decir, se llevó carro completo.
En política, habrá que ver la posición de Trump frente a la OTAN, con la que tuvo diferencias en su mandato anterior, en un momento que es clave el apoyo de Estados Unidos por la guerra entre Ucrania y Rusia; su postura final frente al conflicto de Oriente Medio, y la del medio ambiente, donde apoya las energías fósiles por sobre las limpias, lo que tiene impacto en muchas industrias, incluidas la automotriz y los vehículos eléctricos, por mencionar algunas.
Conforme avanzaban los resultados de la elección, el peso se presionó hasta llegar a niveles máximos de 20.80 pesos/dólar; sin embargo, tras las elecciones, el peso recupero rápido terreno frente al dólar para ubicarse al día siguiente en niveles de 19.76 pesos/dólar para cerrar el viernes en niveles de 20.20 pesos/dólar.
Finalmente, el jueves se reunió la Fed para bajar en un cuarto de punto su tasa de referencia a niveles de entre 4.50 a 4.75%, mientras que los futuros descuentan con una probabilidad del 64.6%, que para la reunión de diciembre baje otro cuarto de punto.
Ello, en un entorno donde parece ubicarse la inflación bajo control y donde el presidente de la Fed, declaró que no renunciaría a su puesto hasta que concluya su gestión en el 2026 a pesar de que Trump indicó que lo cambiaría. Por lo pronto, este semana habrá que estar pendientes del dato de inflación en Estados Unidos para octubre, y a la decisión de Política monetaria de Banco de México, en la que se espera un recorte de un cuarto de punto a pesar de haberse incrementado la inflación en el mes de octubre al ubicarse en 4.76% la general, y la subyacente quedar en niveles razonables de 3.80 por ciento. Con todo lo anterior, queda claro que ha habido un cambio de rumbo que afectará a los mercados y habrá que estar muy pendientes.