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Colaboración científica México-España con herramienta de diagnóstico
Fue una gran noticia que Cofepris le dará entrada a protocolos de Investigación para fase III o IV que vengan aprobados por agencias de alta exigencia como la estadounidense FDA o la europea EMA. Lo anunció este lunes y, conforme lo que prevé el secretario David Kershenobich, no habrá razón para esos protocolos tarden más de una semana en aprobarse, y ello simplemente porque el regulador mexicano no tendrá que repetir todo el proceso regulatorio que ya fue hecho por otras agencias de gran prestigio.
En este contexto, van surgiendo iniciativas que abren esperanza de que viene una época positiva para la investigación en México.
Permítanme hoy comentar sobre un esfuerzo de colaboración con España en torno a una herramienta de diagnóstico innovador que es un biomarcador para detección y seguimiento de patologías gastrointestinales.
Es entre el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición "Salvador Zubirán" (INCMNSZ), el Instituto de Investigaciones Biológicas de Veracruz y la empresa Venter Pharma con financiamiento del Gobierno de España, que suma una serie de elementos positivos que llaman la atención.
Ello fue presentado ayer en un evento desarrollado en el Centro Cultural de España, ubicado en el Centro Histórico de la Ciudad de México, a través de dos páneles; uno primero enfocado a “Innovación y avances en gastroenterología” donde se habló de la importancia de analizar los cambios en la microbiota intestinal en pacientes con intolerancia a la lactosa. Fue moderado por el Dr. Luis Uscanga, gastroenterólogo del INCMNSZ con amplia experiencia en enfermedad inflamatoria intestinal junto con sus colegas del mismo Instituto y de la Asociación Mexicana de Gastroenterología. Ahí se destacó sobre el proyecto MARKinPATH cuyo objetivo es posicionar el método presentado para el diagnóstico diferencial en pacientes con síntomas de malabsorción de lactosa y un seguimiento efectivo de la integridad de la mucosa intestinal.
Se trata de un dispositivo llamado LacTEST que consiste en un método no invasivo, directo y cuantitativo para evaluar la actividad enzimática de la lactasa intestinal. Es un tema no menor si consideramos que en México más del 60% de las consultas en gastroenterología están relacionadas con trastornos de malabsorción de lactosa, como la intolerancia a la lactosa, la cual se estima afecta a más de la mitad de los pacientes con síntomas compatibles. Hay estimaciones que hablan que más del 70% de la población mexicana presenta desequilibrios en su microbiota.
En el evento, primero se explicó que la Lactasa es la primera enzima que se pierde cuando hay una alteración de la mucosa intestinal y la última que se recupera cuando desaparece la condición que originó el daño inicial. Luego, se hizo ver que hay una necesidad no cubierta: No existe un método validado que cuantifique la actividad de lactasa intestinal.
Esto conlleva un perjuicio para pacientes, clínicos y los sistemas de salud. Entonces, se explicó, la Innovación con ese biomarcador de la actividad lactasa intestinal permitirá optimizar la práctica médica al reducir el tiempo de diagnóstico y personalizar el tratamiento, mejorando así la calidad de vida de los pacientes.
Otro punto relevante que se destacó es sobre la importancia de evaluar la mucosa intestinal en pacientes con sobrecrecimiento bacteriano (SIBO), facilitando una dieta adecuada tras el tratamiento con antibióticos.
Aparte, en el segundo panel “Retos de la innovación en salud”, el cual tuve la oportunidad de moderar, se abordaron los desafíos que enfrentan las innovaciones médicas para su adopción en los sistemas de salud. Manuel Castellón, consejero en la sociedad de capital de riesgo CRB Health Tech y CEO de Venter Pharma, destacó la importancia de la cooperación público-privada en todos los niveles para facilitar la traslación del conocimiento desde los centros de investigación. Subrayó la necesidad de apoyo financiero, un entorno fiscal favorable y la agilización de procesos regulatorios.