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Comercio, México y EU: dos fechas clave
El gobierno de México, encabezado por la presidenta Claudia Sheinbaum, tiene dos fechas inminentes que redefinirán la relación del país con su principal socio comercial: Estados Unidos.
En ambos casos, México podría ser objeto de la aplicación de elevados aranceles en sus exportaciones al mercado estadounidense.
En la primera fecha, el 20 de enero, México estaría siendo víctima de una decisión unilateral de parte de EU que –de cumplirse–, violaría los fundamentos del acuerdo comercial trilateral: T-MEC.
En la segunda fecha, el 3 de febrero, México podría ser objeto de costosos aranceles, si decide mantener su posición ideológica, respecto del maíz genéticamente modificado o transgénico.
Conforme a lo que prevé el T-MEC, México podría ser sancionado por EU con cuotas compensatorias que impactarían severamente diversos sectores económicos del país.
El pasado 20 de diciembre el gobierno mexicano fue notificado del fallo del panel de solución de controversias. México perdió y EU, ganó.
A partir de entonces, México tiene 45 días para responder.
La fecha máxima de respuesta es el 3 de febrero de este año 2025.
En consecuencia, México enfrentará dos fechas clave para su relación comercial con EU.
La primera fecha, el 20 de enero, Donald Trump, asumirá formalmente la presidencia de EU.
Ese día será clave para ambos países.
Como presidente electo amenazó con imponer, desde el primer día de su gobierno, aranceles del 25% a las importaciones que lleguen a su país desde México y Canadá.
Además, impondrá un arancel del 10% a los productos que originalmente hayan sido producidos en China.
Trump también ha amenazado con imponer un arancel de entre 200 y 500% a las importaciones de autos mexicanos.
No podrán vender ni un auto, ha advertido.
Está por verse si el próximo 20 de enero, Trump cumple con su amenaza e impone aranceles contra México.
Una medida como esa, iría en contra del Tratado México, Estados Unidos, Canadá (T-MEC), firmado por el propio Trump.
Hay que recordar que, durante su primer mandato, luego de una agresiva renegociación, declaró que había alcanzado el mejor acuerdo comercial.
Previamente, como candidato, decía que el Nafta era uno de los peores acuerdos comerciales de la historia.
Al final se salió con la suya, logró presionar a México en distintos rubros ajenos a los temas comerciales y alcanzó una de sus principales victorias en su mandato.
Como consecuencia de sus virulentas amenazas en México se registró una fuerte depreciación del peso frente al dólar y la empresa Ford canceló una inversión en México por 1,600 millones de dólares para una planta de armado en San Luis Potosí.
En aquel momento, Trump dijo que no iba a permitir que el segundo mayor fabricante estadounidense de autos instalará una armadora en México, y que si habría le impondría aranceles a los autos que importará hacia EU. El gobierno de Sheinbaum ha variado su discurso y ha transitado de la contra amenaza inicial de que, por cada arancel de EU, habría uno de parte de México, a la contabilidad de todos los avances que ha logrado México en materia de migración y seguridad, hasta los señalamientos de los daños que provocaría a la distintos sectores empresariales de EU y a sus consumidores una política unilateral de aranceles.
En el tema del maíz genéticamente modificado, México ya perdió el panel y esa es una realidad inobjetable. Habrá que ver cómo reacciona el gobierno mexicano.
De acuerdo con un análisis del Grupo de Consultoría de Mercados Agrícolas, encabezado por Juan Carlos Anaya, México tiene 45 días para acatar el fallo.
Entre las posibles acciones están:
1.- Eliminar los decretos del 31 de diciembre de 2020 y el 13 de febrero de 2023. 2.- Negociar con EUA y Canadá sobre las restricciones. 3.-Mantener prohibiciones específicas, lo que podría llevar a la imposición de cuotas compensatorias o aranceles.
De persistir en su posición el gobierno mexicano, la disputa comercial podría provocar aranceles elevados.
El gobierno de la primera presidenta de México, tiene frente a sí, un enorme desafío en la redefinición de la relación con su principal socio comercial.
De sus decisiones dependerá el impacto que tenga en el crecimiento de la economía mexicana.
El reto es mayúsculo si se considera que la economía mexicana registra un déficit de casi el 6% y el gobierno está comprometido a reducirlo a la mitad. En ese contexto, el nivel de crecimiento económico, es clave. Veremos.