Buscar
Opinión

Lectura 4:00 min

La IA y la volatilidad de los mercados

“La mejor manera de predecir el futuro es crearlo”. 
Peter Drucker.

En el inicio de esta semana, los mercados financieros experimentaron una notable volatilidad, impulsada por el anuncio de la empresa china Deep Seek sobre sus avances en Inteligencia Artificial (IA). Ello provocó movimientos sumamente bruscos, que afectaron las acciones de las principales empresas relacionadas con los avances recientes en IA, no solamente aquellas dedicadas al desarrollo de modelos de aprendizaje, sino también, de manera muy relevante, compañías dedicadas a la construcción del hardware necesario, hasta la fecha, para el funcionamiento y operación de dichos sistemas. El caso más sonado fue de la empresa NVIDIA que cayó más de 8% el precio de su acción como resultado de los reportes, pero otras empresas dedicadas a la fabricación de hardware también cayeron como Broadcom Inc., que también disminuyó más de 8 por ciento. Por otro lado, empresas como Meta o Alphabet, también sufrieron caídas superiores a 3% en un solo día. 

La noticia que provocó este movimiento, se refiere a que la empresa Deep Seek anunció que su modelo de lenguaje R1, que fue lanzado como código abierto la semana pasada, presumiblemente es capaz de tener un nivel de eficiencia parecido al de los modelos similares lanzados en el pasado reciente por la plataforma OpenAI, pero son capaces de hacerlo requiriendo una capacidad de cómputo sensiblemente menor, lo que implica que requieren menores inversiones en procesadores y consecuentemente tienen también mayor eficiencia energética.

Parte del crecimiento acelerado que había tenido, en el pasado reciente, la acción de NVIDIA estaba soportado por la percepción de que las inversiones futuras en Inteligencia Artificial requerirían necesariamente de inversiones masivas en procesadores, liderados, mayoritariamente por esta empresa. La noticia afectó la percepción del potencial de crecimiento futuro, en un contexto que ya percibía que se trataba de una acción con una apreciación desmedida en los últimos meses.

Adicionalmente, de acuerdo con expertos, la noticia provocó una oleada de incertidumbre que se centra en la idea de que occidente no necesariamente lidera de manera exclusiva el proceso de innovación en materia de Inteligencia Artificial, con posible participación de empresas chinas que podrían tener un papel preponderante en el futuro. Ello, además se inscribe en el contexto del conflicto geoestratégico entre Estados Unidos y China.

La reacción del mercado sirve también para evidenciar la extrema sensibilidad de los mercados financieros, porque la reacción es inmediata y no necesariamente incorpora elementos absolutamente probados y racionales en sus decisiones.

Falta todavía evidencia clara de que la eficiencia declarada de la empresa China sea de la magnitud que se ha anunciado, sorprende que otras empresas en occidente no hubieran analizado modelos alternativos con similares niveles de eficiencia, y éstos no se conocieran hasta la fecha.

De la misma manera que los mercados financieros provocaron una exagerada apreciación de ciertas acciones, asumiendo escenarios extraordinariamente optimistas sobre crecimiento de su actividad y su rentabilidad futura, ahora reaccionan de forma extraordinariamente pesimista frente a elementos que aún son inciertos.

Tampoco debería resultar una sorpresa que China presente condiciones de evolución tecnológica, acelerada, cuándo en ciertos mercados, por ejemplo, el de autos eléctricos, claramente ha alcanzado un liderazgo y dominancia. Cabe recordar que la economía China, por su tamaño relevante y por ser centralmente dirigida, tiene la capacidad de tomar decisiones que no necesariamente respondan a criterios de rentabilidad de corto plazo, y sí a la búsqueda de un posicionamiento estratégico a nivel global.

La volatilidad observada, por supuesto, no se limitó a las acciones de empresas de tecnología. Los mercados en general mostraron signos de nerviosismo, ya que la incertidumbre sobre el futuro de la IA y la competencia geopolítica que ello implica, representaron una visión de mayor riesgo potencial para ciertos grupos de inversionistas.

La volatilidad seguirá en la medida en que los avances en IA y las tensiones comerciales y políticas entre Estados Unidos y China, llevan a pensar en sus repercusiones de corto y largo plazo para los mercados.

La reacción del mercado sirve también para evidenciar la extrema sensibilidad de los mercados financieros, porque la reacción es inmediata y no necesariamente incorpora elementos absolutamente probados y racionales en sus decisiones.

El autor es politólogo, mercadólogo, financiero, especialista en economía conductual y profesor de la Facultad de Economía de la UNAM. CEO de Fibra Educa y Presidente del Consejo para el Fomento del Ahorro Educativo.

Únete infórmate descubre

Suscríbete a nuestros
Newsletters

Ve a nuestros Newslettersregístrate aquí

Últimas noticias

Noticias Recomendadas

Suscríbete