Lectura 4:00 min
Mazzucato en México
Esta semana estuvo en México la destacada y reconocida economista Mariana Mazzucato, profesora de Economía de Innovación y Valor Público y directora del Instituto para Innovación y Propósito Público de UCL en Reino Unido, y el RM Phillips Chair en Economía de Innovación en la Universidad de Sussex. En 2013, The New Republic la consideró una de “los tres pensadores más importantes sobre innovación”. Sus principales libros son: El valor de las cosas, El estado emprendedor y Economía con misión.
En sus textos Mazzucato enfatiza la importancia del papel del Estado en la economía, especialmente en la innovación y un desarrollo más dinámico. Para un país como México, su mensaje central podría resumirse en la necesidad de que el gobierno asuma un papel activo en la creación de un entorno que fomente la innovación y el crecimiento sostenible, con inversión pública y privada.
La economista argumenta que el Estado no solo debe ser un regulador, sino también un inversor que se involucre en la investigación y el desarrollo. Esto podría ser especialmente relevante para nuestro país en áreas como las nuevas tecnologías, la salud y la transición energética. Además, sugiere que se deben crear políticas que alineen los intereses públicos y privados, asegurando que los beneficios de la innovación se distribuyan de manera equitativa entre las instituciones participantes y la sociedad. En este contexto, cabe destacar y celebrar la decisión que se anunció en estos días por parte de la compañía asiática Nvidia, principal productor de semiconductores del mundo, de abrir una planta en Guadalajara para proveer a Foxconn, uno de sus principales clientes. Otro ejemplo más de la relocalización que tanto puede beneficiar a nuestro país.
En Mission Economy, Mariana Mazzucato propone un enfoque innovador para la economía, centrado en la idea de que los gobiernos deben de tener una visión de “misiones” para abordar los desafíos económicos y sociales que urge resolver. En lugar de enfocarse solo en políticas públicas desde el gobierno, o medidas de austeridad o, peor aún, solamente en la dinámica del libre mercado, ella sugiere que se establezcan objetivos ambiciosos y claros, similares a los programas de la NASA en la carrera espacial, para guiar la inversión pública y la colaboración entre sectores.
Mazzucato argumenta que estas “misiones” deben diseñarse para abordar problemas complejos como la crisis climática, la salud pública y la desigualdad económica, ya que sin el papel del Estado sería imposible resolverlos. Al alinear recursos, públicos y privados, y esfuerzos hacia metas comunes, se puede fomentar la colaboración indispensable para la innovación, crear empleos y generar un crecimiento económico sostenible y equitativo.
Desde una perspectiva, distinta al falso debate entre más o menos Estado, el nuevo gobierno de la presidenta Sheinbaum tiene la oportunidad de impulsar un enfoque proactivo del gobierno en la economía, donde la colaboración con la academia y las empresas, sean la clave para transformar desafíos en oportunidades, y para solucionar los cuellos de botella en la economía que nos impiden crecer con mayor dinamismo.
En síntesis, el mensaje de Mazzucato para México en este momento de una nueva Administración es fortalecer el papel del Estado en la economía para impulsar la innovación, e impulsar un crecimiento inclusivo y sostenible; es decir: bienestar compartido.