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Pagará 25% de arancel 60% de cada auto mexicano
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció la aplicación de un arancel del 25%, de carácter permanente, en contra de las importaciones de autos a ese país.
Por razones de seguridad nacional, la disposición aplicará para vehículos y camiones ligeros de cualquier país y entrará en vigor el 2 de abril, sin excepciones.
La decisión del gobierno estadounidense, es un fuerte manotazo en contra de México y en contra del Tratado México, Estados Unidos, Canadá.
De entrada, viola el acuerdo comercial, que re negoció y firmó con México, el propio Donald Trump, en su primer mandato.
Viola el acuerdo porque aplica aranceles de manera unilateral en contra de México, su principal socio comercial.
En la proclamación de las nuevas tarifas, el presidente de EU, consideró como una amenaza para la seguridad nacional la importación de autos y autopartes de México y Canadá.
Trump ratificó que su política arancelaria tiene dos objetivos concretos: reindustrializar a Estados Unidos; atraer a su territorio inversiones estadounidenses y foráneas.
Y recaudar, mediante el cobro de tarifas, cantidades, que considera, serán extraordinarias.
La noticia para México, tiene dos caras.
La buena: los autos exportados de México a EU bajo el T-MEC estarán exentos del arancel, por ahora.
En consecuencia, el golpe al sector será importante.
Es decir, el golpe no será al 100% de las exportaciones mexicanas. Pero sí afectará al 60% del contenido de los autos mexicanos exportados a EU, de acuerdo con estimaciones del Cato Institute .
El golpe contra México no será inmediato. Viene un profundo y complicado proceso de revisión para diseccionar qué partes del auto que se exporta a EU cumplen y cuáles no.
Cuando se determine, entonces se aplicará la tarifa del 25% a aquellas partes que no cumplen con el T-MEC.
La mala, es que además del golpe y la carga burocrática que representará para la industria la verificación y comprobación del origen de cada parte del auto, será muy importante el impacto negativo por la incertidumbre que la nueva política arancelaria implica para las armadoras.
El deseo expreso pública y abiertamente por el presidente de EU, de que las armadoras regresen a su país para invertir y generar empleos en su territorio nacional, provoca nerviosismo y por lo menos retardará las decisiones de inversión.
De hecho ya se están registrando empresas que cambiaron su decisión de invertir en México, para hacerlo en Estados Unidos, como es el caso de Honda, de acuerdo a lo que reveló el propio presidente estadounidense.
Trump prevé que la medida, que afectará también a camiones ligeros, le puede llegar a reportar a las arcas estadounidenses una cantidad de entre 600 mil millones y 1 billón de dólares, en los próximos dos años.
Los aranceles a los autos por parte de Estados Unidos a México representan un fuerte golpe a la integración comercial alcanzada a lo largo de 30 años.
En esas tres décadas se ha construído un clúster norteamericdano de fabricación de autos muy exitoso.
Y México ha sido beneficiario de esa bonanza. Tanto así que el año pasado, en 2024, se convirtió en el quinto productor mundial de vehículos.
En el año 2023 México había escalado a la séptima posición.
Los aranceles estadounidenses tendrán un efecto boomerang sobre las empresas de EU en México, venía advirtiendo el presidente de la AMIA, Rogelio Garza.
Su potencial aplicación, implica –advertía previo al anuncio oficial– un cambio en las reglas de operación del tratado comercial entre los tres países que integran el T-MEC, además de nuevos desafíos para la industria.
México, Estados Unidos y Canadá venían operando con la aplicación de una regla de origen (que pasó del 62.5 al 75%) para la industria automotriz que convirtió al tratado en uno de los más estrictos del mundo.
La fortaleza de la integración comercial en la región norteamericana, no fue un obstáculo para su cambio en la perspectiva.
Para México será un reto enfrentar la nueva realidad, justo cuando venía registrado la mayor fortaleza del sector automotriz que se colocó en el top five de los productores mundiales de vehículos con casi 4 millones de vehículos fabricados, 3.6 millones de ellos exportados al mundo, de los cuales 80% se destinaron a Estados Unidos.
En medio de la crisis de incertidumbre, generada por los aranceles a la industria automotriz, éste sector podría convertirla en oportunidad, si sustituye importaciones, aumenta el contenido regional y convence a EU que la integración comercial le conviene más para enfrentar la competencia China.
Al tiempo.
Atisbos
Luego del sector automotriz mexicano, el que ya está poniendo sus barbas a remojar, es la industria farmacéutica. Y es que el presidente Donald Trump, en el contexto del anuncio de aranceles en contra de los autos, anticipó que aplicará aranceles recíprocos a la industria farmacéutica.