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Beneficiario del sistema, acusado de secuestro
La Fuerza Antisecuestros (Fas) de la PGJCDMX capturaron a un sujeto de 34 años de edad, líder de una banda de secuestradores que operaba en la capital y el Estado de México, quien purgó 10 condenas por diversos delitos, incluso homicidio; sin embargo, aprovechó los beneficios del sistema penal para ser liberado y seguir delinquiendo.
Elementos de la Policía de Investigación adscritos a la Fuerza Antisecuestros (Fas) de la PGJCDMX capturaron a un sujeto de 34 años de edad, líder de una banda de secuestradores que operaba en la capital y el Estado de México, quien purgó 10 condenas por diversos delitos, incluso homicidio; sin embargo, aprovechó los beneficios del sistema penal para ser liberado y seguir delinquiendo.
La Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México (PGJCDMX) informó que el mencionado se sujetó a la ley de protección de datos -por lo que no se puede revelar su identidad- pero se comprobó que era quien reclutaba a los integrantes de la banda, 14 de ellos detenidos y sujetos a proceso, mientras que a él se le atribuyen 10 actos delictivos, cuatro en el 2014, cuatro en el 2015 y dos en el 2016.
Los integrantes de la Fas ejecutaron la orden de aprehensión el pasado 24 de diciembre, por lo que el imputado quedó internado en el Reclusorio Preventivo Oriente, a disposición del juez penal que lo requería, sobre uno de sus últimos delitos, perpetrado el 7 de octubre del 2015, cuando presuntamente privó de su libertad a un comerciante, a quien mantuvo cautivo hasta el día 29 del mismo mes y año.
Según la causa penal, el detenido era el líder de una banda de plagiarios que operaba en las delegaciones Tlalpan, Iztapalapa y Gustavo A. Madero, en la Ciudad de México, así como en el municipio de Ecatepec, Estado de México.
Hasta el momento, 14 de sus cómplices han sido detenidos y sujetos a proceso en diversos reclusorios capitalinos, entre el 2014 y el 2016.
La Procuraduría informó que, de acuerdo con los expedientes, la participación del indiciado consistía en reclutar a sus cómplices, dotarlos de insumos para llevar a cabo los secuestros, señalar a las víctimas y asesorar en las negociaciones. Se prevé que alcance una pena privativa de libertad de 50 a 100 años.