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En frontera con EU creció 48% detención de niños
Es el número mensual más alto de menores atrapados desde la ola de niños migrantes de febrero a julio del 2014 y el séptimo desde octubre del 2009.
La Patrulla Fronteriza aprehendió a 4,632 migrantes menores no acompañados, la mayoría de ellos de América Central, en la línea fronteriza entre México y Estados Unidos, en agosto del 2015. Las estadísticas demuestran que los traficantes de personas se están ajustando a los cambios en la seguridad fronteriza.
Es el número mensual más alto de menores atrapados desde la ola de niños que tuvo lugar de febrero a julio del 2014 y el séptimo desde octubre del 2009, cuando la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA, por sus iniciales en inglés) comenzó a recabar datos, advirtió la no gubernamental con sede en Estados Unidos (EU).
Al contar entre los meses de agosto del año en curso y del 2014 cuando fueron detenidos 3,138 niños , la cifra ascendió en 48%, de acuerdo con cálculos del especialista en temas de políticas de seguridad militar y regional de WOLA, Adam Isacson.
En una investigación, el autor expone que este centro espera que cuando el año fiscal de EU cierre, hacia finales de este mes, la Patrulla Fronteriza habrá detenido a cerca de 36,500 niños, unos 26,000 de los países del Triángulo Norte.
Esta cifra es sólo la mitad del total registrado en el 2014, que fue de 67, 339 menores y 51,705 de los países centroamericanos. El aumento de los miembros de unidades familiares (padres que viajan con niños) fue tal vez más notable en agosto, ya que la Patrulla Fronteriza aprehendió a 5,158 de ellos, frente a 4,506 en julio.
La Patrulla Fronteriza continúa deteniendo a los niños y familias en su sector del Valle del Río Grande, en la frontera entre Estados Unidos y México, en Texas, cerca del golfo. Esta área es la distancia más corta desde Centroamérica, advierte el investigador.
Aunque en números mucho más bajos, las detenciones de menores de edad no acompañados creció a más del doble en algunos sectores deshabitados en otras partes de la frontera, en particular al oeste de Texas y en Yuma, al oeste de Arizona, puede indicar que los contrabandistas de niños tratan de utilizar nuevas rutas para cruzar a Estados Unidos, en respuesta a una acumulación de seguridad fronteriza en el Valle del Río Grande.
Asimismo, la puesta en marcha del Plan Frontera Sur en México ha doblado las deportaciones de centroamericanos desde el país y los traficantes de personas aumentaron sus precios. Por ejemplo, un viaje de Guatemala a la Unión Americana pasó de 7,000 dólares hasta 11,000 dólares
Estas estadísticas recuerdan que la violencia y la pobreza que causó la ola de migración del año pasado permanecen sin cambios, y que la respuesta del gobierno de Estados Unidos paralizado por la falta de acción del Congreso ha sido insignificante.
Sin embargo, el cambio en la política migratoria más fuerte se registró en México. La respuesta mexicana fue una ofensiva que ignora los peligros que miles de niños centroamericanos devueltos podrían enfrentar. Y ahora, los números parecen demostrar que los contrabandistas de inmigrantes se están adaptando de todos modos , concluye.
