Inicia estiaje y el Valle de México y Guadalajara padecen ya desabasto de agua

Apenas inició la temporada de estiaje y las zonas metropolitanas de las ciudades de México y Guadalajara padecen ya desabasto o reducción del suministro de agua potable en algunos sectores.

En el Valle de México, alrededor de siete millones de personas de 12 alcaldías de la Ciudad de México y dos millones de 13 municipios mexiquenses son afectados por la disminución del suministro. En tanto, cientos de familias de 139 colonias de Guadalajara, Zapopan y Tonalá, enfrentan las consecuencias de cortes y tandeos.

De acuerdo con Víctor Javier Burgett Ortiz, director general del Organismo de Cuenca Aguas del Valle de México, que opera el Sistema Cutzamala, hasta el lunes pasado, el nivel de almacenamiento de esa infraestructura donde hay siete presas derivadoras y tres de almacenamiento, era de 49.1% cuando el almacenamiento histórico a la misma fecha era de 71.9 por ciento. Eso quiere decir que hoy está 22% menos del nivel promedio que ha tenido históricamente a estas fechas.

En términos absolutos las cifras refieren que actualmente tienen 178.4 hectómetros cúbicos menos que el almacenamiento promedio a la misma fecha.

De acuerdo con los registros de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), el almacenamiento de las presas del Sistema Cutzamala, al 22 de marzo pasado, era de 348.4 hectómetros cúbicos, lo cual se ubica por debajo de la curva de menos almacenamiento que ocurrió en 2019, cuando a estas fechas tuvo su nivel más bajo y fue de 431.2 hectómetros cúbicos. Las proyecciones de la Conagua estiman que baje a 373.8 en las próximas semanas.

Eso indica que el nivel de almacenamiento actual en esos cuerpos de agua es el más bajo que la media histórica registrada entre 1996 y 2020.

Eso se debe a que el año pasado se registraron pocas lluvias y a la ausencia de ellas en lo que va del año. El monitoreo de sequía de la cuenca del río Cutzamala, realizado por Conagua, señala que desde el 28 de febrero pasado ya se tenían condiciones de sequía severa en 66.3% y 33% en sequía moderada, debido a las lluvias insuficientes del año pasado.

Habrá disminución del suministro

Debido a los bajos niveles de llenado de las presas que abastecen de agua potable al Valle de México, a través del sistema Cutzamala, la Conagua determinó reducir el suministro, a partir de mediados de mayo y así lo mantendrá todo lo que resta del año.

Sin embargo, este fin de semana se redujo el volumen enviado, tanto a la Ciudad de México como al Estado de México, a través de ese sistema, porque se realizaron trabajos de mantenimiento.

Las maniobras comenzaron a las 00:00 horas del jueves pasado y se tenía previsto durarían 48 horas. Durante ese tiempo se redujo la cantidad de agua aportada a ambas entidades de 14.8 a 13.2 metros cúbicos por segundo. Concretamente se realizó la desconexión de una bomba de una de las líneas de alta presión, para concluir trabajos pendientes en el sistema.

Eso afectó directamente a 12 alcaldías de la Ciudad de México que son Álvaro Obregón, Azcapotzalco, Benito Juárez, Coyoacán, Cuauhtémoc, Cuajimalpa, Iztapalapa, Iztacalco, Magdalena Contreras, Miguel Hidalgo, Venustiano Carranza y Tlalpan, donde viven alrededor de siete millones de personas. 

Eso también impacta a 12 municipios mexiquenses ubicados en el Valle de México. Jorge Joaquín González Bezares, vocal ejecutivo de la Comisión de Aguas de esa entidad, detalló que, los municipios afectados son Atizapán, Acolman, Cuautitlán Izcalli, Coacalco, Ecatepec, Huixquilucan, Naucalpan, Nicolás Romero, Tlalnepantla, Tultitlán, Tecámac, Nezahualcóyotl, así como a la ciudad de Toluca, donde viven dos millones de personas. En esos lugares se habilitaron 46 pipas para reparto del líquido.

Al término de las labores de mantenimiento y hasta el 15 de mayo, el Cutzamala podrá entregar de manera constante nuevamente a ambas entidades los 14.8 metros cúbicos por segundo que venía recibiendo, pero, a partir del 16 de mayo la entrega será de 13.2 metros cúbicos por segundo, para mejorar la operación y garantizar el abasto a la Zona Metropolitana del Valle de México durante 2021.

Víctor Javier Burgett Ortiz director general del Organismo de Cuenca Aguas del Valle de México, que opera el Sistema Cutzamala, explicó que, desde agosto de 2020 se comenzó a reducir el suministro al Valle de México a razón de 500 litros por segundo y, desde noviembre, otros 500.

Según las estadísticas de la Conagua, durante los meses de enero y febrero de 2021 ese sistema entregó a la Comisión del Agua del Estado de México (Caem) y al Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex) 14.8 metros cúbicos por segundo y así se mantiene.

Durante enero y febrero, la Ciudad de México ha recibido 9.3 metros cúbicos por segundo y así se espera mantener hasta el 15 de mayo. A partir del 16 de ese mes recibirá 8.2 metros cúbicos por segundo y así se mantendrá hasta el fin de año.

En tanto los municipios mexiquenses beneficiados por el sistema Cutzamala, durante enero y febrero recibieron un volumen de agua de 5.5 metros cúbicos por segundo y así se mantendrán hasta el 15 de mayo y a partir del 16 de ese mes y hasta el fin de año recibirán un promedio de 5 metros cúbicos por segundo.

2009, el año más seco del pasado reciente

Según los registros históricos del organismo federal, el año más crítico en cuanto a la entrega en bloque de agua del sistema Cutzamala al Valle de México fue 2009, cuando se enviaron 12.7 metros cúbicos por segundo, seguido por 2013 cuando se canalizaron 13.3. Luego subió ligeramente hasta 15.5 metros cúbicos por segundo en 2018 cuando se dio la entrega más voluminosa.

Las estadísticas muestran que durante los últimos dos años el volumen de envío de agua del Cutzamala al Valle de México bajó al pasar de 16.5 metros cúbicos por segundo, en 2018 a 15.8 en 2019 y 15.6 en 2020 y se espera que para 2021 el promedio sea de 13.7. El volumen de entrega en este año será el segundo más bajo de los últimos 10 años, solo por arriba de los 13.3 entregados en 2013.

De acuerdo con Rafael Carmona Paredes, Coordinador General del Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex), la capital del país consume cada segundo 32,618 litros de agua potable de los cuales 38% provienen del sistema Cutzamala y 62% de otras fuentes.

A través de red propia trae 20.4 metros cúbicos por segundo, de los cuales 14.3 de pozos de la Ciudad de México, 3.8 de pozos de Chiconautla y 0.8 de manantiales y el río Magdalena y 1.5 de pozos de Chiconautla.

De la red de Conagua recibe 12.3 metros cúbicos por segundo, de los cuales 9.7 vía sistema Cutzamala, 1.9 de pozos de Barrientos y 0.6 de los pozos de La Caldera.

La jefa de gobierno de la CDMX, Claudia Sheinbaum Pardo, explicó que actualmente estamos en un momento difícil de sequía en todo el país y particularmente esto afecta a las presas del Sistema Cutzamala, y ha habido una disminución de la cantidad de agua que viene de esa fuente, “pero, gracias tanto al trabajo de sectorización, como a otras obras que se han venido haciendo, como de ampliación del Sistema Lerma, no estamos sufriendo tanto como podríamos estar sufriendo, aunque sabemos que hay muchísimas zonas de la ciudad que tienen carencia en este momento, particularmente en Iztapalapa, Tlalpan y Tláhuac, donde hay un problema importante de abastecimiento”.

En ese sentido Carmona Paredes informó que, hasta el 7 de febrero de 2021, se habían distribuido en pipas 674,800 metros cúbicos de agua, 79% de la cual se han destinado a colonias de las tres delegaciones citadas.

Guadalajara ya se bebió caudal de la presa Calderón

Durante las últimas semanas, como ocurre cada año, desde hace varios lustros, cientos de familias de la zona metropolitana de Guadalajara padecen por la escasez de agua potable. Se trata de un problema recurrente, cuya solución se ha convertido en un bote pateado por las autoridades locales y federales, desde al menos hace 30 años.

Desde la última semana de febrero, fue cerrado el suministro desde la Presa Ingeniero Elías González Chávez, mejor conocida como Puente Calderón, ubicada en el municipio de Zapotlanejo, que abastece al norte de la ciudad de Guadalajara, particularmente los municipios de Zapopan, Guadalajara y Tonalá, a través de la planta potabilizadora San Gaspar, debido a que está prácticamente seca.

De acuerdo con el gobierno del estado, esa situación se debe a que dejó de llover prácticamente todo el año pasado y a que se incrementó en alrededor de 11% el consumo de agua en la capital del estado por las medidas de higiene recomendadas por las autoridades para contener la pandemia de Covid-19.

Carlos Enrique Torres Lugo, director general del Sistema Intermunicipal de los Servicios de Agua Potable y Alcantarillado (Siapa) informó que el 18 de marzo se implementó un plan emergente de abasto rotatorio en 139 colonias de los municipios de Guadalajara y Zapopan. Las colonias afectadas del norponiente de la ciudad fueron divididas en dos bloques. Cada uno tendrá suministro desde la red de agua con dos días de flujo constante y dos días con servicio intermitente.

Adicionalmente hay un polígono de 55 colonias de Zapopan, Tlaquepaque y Tonalá, donde, por cierto, todos los años enfrentan problemas de desabasto de agua por la deficiente infraestructura con que cuentan, que recibirán agua mediante pipas y cisternas comunitarias. Para esas acciones se destinaron 50 millones de pesos adicionales al presupuesto del Siapa.

Un problema de distribución

Según el gobierno del estado, 14% del agua que se suministran a Guadalajara proviene de la presa Calderón y el resto proviene, tanto de la cuenca del Lago de Chapala, como del sistema de pozos profundos, ubicados en diferentes zonas de la ciudad. Estos dos últimos operan con normalidad.

El gobernador, Enrique Alfaro Ramírez, afirmó que el desabasto que enfrenta la ciudad debe resolverse por dos vías: la conclusión del acuaférico proyectado desde hace 30 años y la operación de la presa El Zapotillo, para traer agua del río Verde.

Alfaro Ramírez, también afirmó que se trata de un problema de distribución, porque nunca se hizo una red para el suministro a los hogares capitalinos que permitiera articular el sistema a nivel metropolitano.

Indicó que hace dos años, su gobierno inició la construcción del acuaférico de Guadalajara que rodea la ciudad, con el fin de distribuir a todas las colonias de la mancha urbana.  Falta terminar un tramo localizado a la altura del estadio del equipo de futbol Chivas.

La presa El Zapotillo y un sistema llamado El Purgatorio

Para el mandatario “la única opción real” al problema es aprovechar el agua del río Verde, lo cual, de paso, solucionaría el abasto de municipios de la región de Los Altos y la ciudad de León, Guanajuato. Esa salida requiere la operación de la Presa El Zapotillo y el sistema de El Purgatorio. Así se llama.

Eso implica echar a andar un proyecto que inició en 1995, cuando se emitió un decreto federal de reserva de un porcentaje de agua disponible del río Verde que escurre desde Aguascalientes hasta la cuenca del río Santiago al sureste de Guadalajara.

La construcción de la presa inició en 2009, pero, en febrero de 2011, un juez ordenó detener la construcción de la cortina hasta en tanto se garanticen los derechos de comunidades que se manifestaron afectadas. Las obras fueron detenidas en 2014.

La semana pasada, el gobernador Enrique Alfaro Ramírez, expuso que la presa El Zapotillo ya fue terminada y que solo falta hacer la cortina y obras complementarias, por lo que pedirá a la federación a través de la CONAGUA, información sobre en qué estatus se encuentra la obra y el presupuesto actualizado de lo que falta por concluir.

El 14 de marzo pasado, el gobernador pidió ayuda al presidente Andrés Manuel López Obrador para solucionar el problema, durante una gira de trabajo del mandatario federal por Tequila, Jalisco. Ese día, el presidente le dijo públicamente que su gobierno ayudará a Jalisco a resolver ese problema.

El lunes pasado, el gobernador Alfaro Ramírez viajó a la Ciudad de México para entrevistarse con la directora de Conagua, Jiménez Cisneros y con el coordinador de asesores de la presidencia, Lázaro Cárdenas Batel, a quienes les planteó la reactivación de la presa.

Para el mandatario, si no se aprovecha el caudal del río Verde, no va a ser posible solucionar el problema de abasto a la zona metropolitana de Guadalajara.

diego.badillo@eleconomista.mx