Lectura 3:00 min
Mancera Espinosa atestiguo el primer juicio oral
El jefe de gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera Espinosa atestiguo el primer juicio oral en la Ciudad de México a 11 días de entrar en vigor el nuevo sistema de justicia penal, en su primera etapa para delitos no graves.
El jefe de gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera Espinosa atestiguo el primer juicio oral en la Ciudad de México a 11 días de entrar en vigor el nuevo sistema de justicia penal, en su primera etapa para delitos no graves, que correspondió estrenar a la juez Nelly Ivonne Cortés en la Sala Magna de Juicios Orales ubicada en la sede del Poder Judicial de la ciudad en la colonia Doctores.
En un acto que no estaba programado en la agenda de Mancera Espinosa y de bote pronto se hizo la convocatoria, estuvieron presentes el magistrado-presidente del TSJDF, Édgar Elías Azar y el abogado de los capitalinos, Rodolfo Fernando Ríos Garza, el caso fue del conductor que el pasado 25 de enero en estado de ebriedad a bordo de un BMW atropelló a tres ciclistas del club Guepardos en la glorita de Chivatito.
Ríos Garza comentó que hasta la fecha van 747 carpetas de investigación integradas, se han iniciado 194 mediaciones y firmado 26 convenios, en tanto el magistrado Elías Azar dijo que habrá otros dos juicios y el fin de semana se elevará el número, si es que no se logra mediar antes la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) como lo han hecho excelentemente los mediadores hasta el momento.
Mancera Espinosa en entrevista sostuvo que el cambio de aplicación de la justicia en esta modalidad significa un desarrollo diametralmente opuesto al anterior porque acabamos de ver que la impartidora de justicia con las evidencias que presentó la PGJDF decreto la legal detención, el imputado pudo opinar y si es como dice el presidente del Tribunal, estaríamos siendo testigos de la primera sentencia en un mes.
Recordó que en otro tiempo el juicio hubiera sido absolutamente escrito, es decir hubieran llegado las constancias a un juez de la causa y éste hubiera dictado un auto de radicación y posteriormente hubiera hecho la razón para entrar a la determinación de si es que hubiera sido legal o no la detención, con un razonamiento escrito y todo mundo se hubiera enterado posteriormente qué tomó en cuenta o qué dejó de tomar en cuenta.
Agregó que en este caso tiene oportunidad el Ministerio Público, la defensa y el imputado a emitir su opinión, por lo que este nuevo procedimiento es más garantista y con los turnos que se tenían anteriormente hubiera sido esto mucho más largo, por eso comentábamos con el Presidente del TSJDF que muy probablemente este asunto se esté resolviendo en un mes, dependiendo de las pruebas que se ofrezcan.