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Más de una década de acusaciones
Al menos 175 menores de edad fueron víctimas de abusos sexuales cometidos por miembros de esa congregación entre 1941 y el 2019, 60 de ellos víctimas de su fundador, Marcial Maciel.
Los Legionarios de Cristo, una poderosa congregación religiosa con presencia en todo el mundo, lleva más de una década envuelta en acusaciones de abuso sexual, cometidas principalmente por su fundador, el padre Marcial Maciel.
La congregación fundada en 1941 en la Ciudad de México y que cuenta con comunidades legionarias en países como Irlanda, Estados Unidos, Venezuela, Brasil, Francia, Alemania, Italia, Colombia, Filipinas y hasta Corea del Sur, está formada por sacerdotes y candidatos al sacerdocio y compuesta por 961 sacerdotes y 617 seminaristas en todo el mundo.
Es en el año 1948 cuando la Santa Sede concede la aprobación canónica a la Congregación de los Misioneros del Sagrado Corazón y de la Virgen de los Dolores. También se les conocerá como Legionarios de Cristo.
Mientras que para 1954 abre en la Ciudad de México, el Instituto Cumbres, primera obra de apostolado de la Legión de Cristo, para posteriormente, en 1964, abrir sus puertas, también en la capital del país, la Universidad Anáhuac, vinculada a esta congregación.
El 6 de febrero, la Santa Sede concede la aprobación definitiva de la congregación mediante el decretum laudis (decreto de alabanza), para pasar a ser de derecho pontificio y adopta definitivamente el nombre de Legionarios de Cristo.
Ya consolidada como una fuerte agrupación religiosa, en 1966 los Legionarios de Cristo fundan el primer Colegio Mano Amiga en la Ciudad de México para niños de escasos recursos.
Después, las versiones de abuso sexual contra seminaristas de la congregación, en el 2006. Una investigación canónica de la Congregación para la Doctrina de la Fe llega a una certeza moral suficiente para imponer sanciones canónicas graves a Maciel, correspondientes a las acusaciones hechas en contra de él, entre las cuales se incluían abusos sexuales contra seminaristas.
Sin embargo, teniendo en cuenta tanto la edad avanzada del padre Maciel como su delicada salud, la Congregación para la Doctrina de la Fe decide renunciar a un proceso canónico e invitar al padre a una vida reservada de oración y de penitencia, dejando todo ministerio público. Maciel aprobó y aceptó estas decisiones.
Dos años más tarde, el 30 de enero, Marcial Maciel fallece en Jacksonville (Florida, Estados Unidos). Sus restos se entierran en el cementerio de su pueblo natal, Cotija de la Paz, México.
Para el 2009, la congregación de los Legionarios de Cristo confirma públicamente que el padre Maciel tuvo una hija en el contexto de una relación prolongada y estable con una mujer y otras conductas gravemente reprobables. Algunos meses más tarde, se presentan en los medios de comunicación otras dos personas, hermanos entre sí, que afirman ser hijos de Maciel, fruto de la relación con otra mujer.
Informe de abusos
Fue hasta el 2019, después de que el papa Francisco eliminara el secreto pontificio para las denuncias de abusos sexuales, cuando los Legionarios de Cristo dieron a conocer un informe donde se indica que al menos 175 menores de edad fueron víctimas de abusos sexuales cometidos por miembros de esa congregación entre 1941 y el 2019, 60 de ellos víctimas de su fundador, Marcial Maciel.
Los abusos fueron perpetrados por 33 religiosos cuando eran sacerdotes o diáconos. El informe señala que de los 33 sacerdotes que cometieron abusos, sin considerar a Maciel, 18 son parte de la congregación, pero están apartados de labores públicas o que impliquen contacto con menores.
Además, de los 33 sacerdotes que han cometido abusos, 14 a su vez habían sido víctimas en la congregación, lo que evidenció la existencia de una cadena de abuso donde una víctima de un legionario, con el pasar de los años, se convertía a su vez en abusador.